Incongruencias
Por el derecho a la libertad de expresión
Dos asuntos tienen en vilo la perturbación política que se presenta en el país. Por un lado, está la revelación con que la Unidad de Investigación Financiera ha denunciado a Francisco Javier García Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas, de delincuencia organizada, operación de recursos de procedencia Ilícita y defraudación fiscal equiparada. Se le achaca la posesión de varios millones de pesos y propiedades obtenidos de manera dudosa. Por su parte el Gobernador alega que los supuestos delitos son una venganza por la controversia constitucional alrededor de las energías limpias. En este asunto, López Obrador dice que prefiere no inmiscuirse y que sean las autoridades competentes las que investiguen; por otro lado, los ciudadanos estamos consternados por el posicionamiento público del Presidente de la República, respecto de las demandas por abuso sexual de mujeres contra Félix Salgado Macedonio, candidato a gobernador por el estado de Guerrero por Morena, alegando que es un linchamiento, pero no argumenta que esto deba ser investigado formalmente.
En ambos asuntos el ejercicio abusivo del poder y la corrupción, son los principales componentes. Los dos personajes en conflicto son miembros prominentes de partidos políticos, que han formado equipos fuertes y añejos, y están poniendo en ebullición al país. Las discusiones que se den en las cámaras de diputados y senadores pueden poner en la cárcel a García Cabeza de Vaca, y exacerbar la división de la oposición y el gobierno. Si las acusaciones tienen verdadera y fehaciente información, la conclusión del proceso judicial con una sentencia, sería positiva para la credibilidad de nuestro sistema de justicia. Si los datos no son reales, se incrementará la desconfianza de la ciudadanía en los procesos judiciales en general. En el caso de Salgado Macedonio, el asunto ya está mermando las fuerzas al interior de Morena. La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, ya enmarcó su posición contra la candidatura de éste. Se espera que muchas más mujeres morenistas se agreguen y revuelvan la enrarecida atmósfera que se respira en este partido.
Estos dos posicionamientos contradictorios de López Obrador le hacen daño a la nación. Su atractivo discurso contra la corrupción se ha ido perdiendo en el olvido, cuando no ha iniciado el gran movimiento de investigación y procesamiento judicial, de los funcionarios corruptos que padecemos. En Baja California, tenemos denuncias concretas a las que no se les ha dado seguimiento. Aunque Jaime Bonilla, gobernador de Baja California, aseguró que iba a perseguir incansablemente a Kiko Vega, el exgobernador, nada ha pasado. En Tecate, seguimos esperando para que se proceda contra Javier Ignacio Urbalejo Cinco, César Moreno González de Castilla y Nereida Fuentes -exalcaldes priístas tecatenses- por los posibles delitos de enriquecimiento inexplicable e ilícito, entre otros. No obstante, hasta la fecha no se ve que se siga un procedimiento legal contra ellos. Las incongruencias que se presentan entre las denuncias contra los delincuentes y el inicio de procesos penales son enormes. Mientras que más datos aparecen publicados en los medios nacionales y locales, la conducta de quienes deben perseguir a los denunciados es apática y omisa. No se mira por ningún lado el interés real del gobierno por atacar frontalmente a la corrupción. Vale.