Miedo al cambio
El cambio es una de esas constantes que acompañan al tiempo allá donde habita y se desarrolla. Sucede con las personas porque su voluntad no puede hacer nada para impedirlo, solamente para dirigirlo.
Es natural que te de miedo, pues no tienes la capacidad para saber qué encontrarás exactamente detrás del telón. Sin embargo el cambio es un misterio apasionante que representa el mejor reto para el ser.
¿Qué implica entender el cambio?
Reconocer el cambio implica entender que la complejidad de la realidad es mucho mayor que la simpleza con la que la tratamos en ocasiones.
Resistencia al cambio
Si entender el cambio es una cuestión complicada, comenzarlo es, en ocasiones, igual o más difícil. Frente a él está la comodidad de estancarse. Otro de los enemigos de la evolución, o al menos de la asunción de riesgos, suelen ser las personas que te quieren. Ellos entienden que el cambio tiene una parte de exposición que te puede hacer vulnerable al sufrimiento.
Las motivaciones del cambio
Te guste o no debes asumir que todas las personas que te rodean te intentan cambiar, pues para ninguna eres exactamente como deberías ser. Las que te quieren bien intentarán potenciar tu evolución y las que te tienen envidia tratarán de hacer que tu evolución se detenga o que simplemente no comience.