Hermana Dulce
Muestra del “amor y el servicio a los pobres y enfermos”
Segunda hija del dentista Augusto Lopes Pontes, profesor de la Facultad de Odontología, y de Dulce María de Souza Brito Lopes Pontes, al nacer el 26 de mayo de 1914, en Salvador, Brasil, bajo el nombre de María Rita de Souza Brito Lopes Pontes. Nació en la calle São José de Bajo, 36, en el barrio de Barbalho, en la parroquia de Santo Antonio Além do Carmo.
Cuentan que de pequeña fue una niña llena de alegría que adoraba jugar a las muñecas, pero que también tenía especial predilección por el futbol, “era simpatizante de Deporte Clube Ypiranga”, equipo formado por la clase trabajadora y los excluidos sociales.
A los siete años, en 1921, perdió a su madre Dulce, quien tenía apenas 26 años. Al año siguiente, junto con sus hermanos Augusto y Dulce (la querida Dulcinha), hizo la primera comunión en la Iglesia de Santo Antonio Além do Carmo.
La vocación para trabajar en beneficio de la población carente tuvo la influencia directa de la familia, una herencia del padre que ella llevó adelante, con el apoyo decisivo de la hermana, Dulcinha.
A los 13 años, gracias a su audacia y sentido de justicia, fuertes rasgos revelados cuando aún era muy joven, la Hermana Dulce pasó a acoger mendigos y a enfermos en su casa, transformando la residencia de la familia en un Centro de Atención. La casa quedó conocida como ‘La Portería de San Francisco’. También fue en esa época que ella manifiestó por primera vez el deseo de dedicarse a la vida religiosa. El 8 de febrero de 1933, poco después de su graduación como profesora, María Rita entró en la Congregación de las Hermanas Misionarias de la Inmaculada Concepción de la Madre de Dios, en la ciudad de São Cristóvão, en Sergipe. El 13 de agosto de 1933, recibió el hábito de monja de las Hermanas Misionarias y adoptó, en homenaje a su madre, el nombre de Hermana Dulce. La primera misión de la Hermana Dulce, como monja, fue enseñar en un colegio mantenido por su congregación, en el barrio de Massaranduba, en la Ciudad Baja, en Salvador (Brasil). Pero su pensamiento estaba volcado realmente hacia el trabajo con los pobres.
Ya en 1935, daba asistencia a la comunidad pobre de Alagados, conjunto de bloques que se consolidó en la parte interna del barrio de Itapagipe. En esa misma época comenzó a atender también a los obreros que eran numerosos en aquel barrio, creando un puesto médico y fundando, en 1936, la União Operária São Francisco (Unidad operaria San Francisco), primera organización obrera católica del estado, que después dio origen al Círculo Obrero de Bahía. En 1937, fundó en conjunto con Fray Hildebrando Kruthaup, el Círculo Obrero de Bahía, mantenido con la recaudación de tres cines que ambos habían construido a través de donaciones (el Cine Roma, el Cine Plataforma y el Cine São Caetano).
En mayo de 1939, la Hermana Dulce inauguró el Colegio San Antonio, escuela pública dedicada a los obreros e hijos de obreros, en el barrio de Massaranduba.
El 13 de marzo de 1992, un viernes, muere a las 16:45, a los 77 años, en el Convento San Antonio, situado en la Av. Dendezeiros.