Conquista al hombre de tus sueños usando los ojos
DRA. K. CHONDA, ¿CLAVES PARA CONQUISTAR A TU PRÍNCIPE AZUL?
Es momento de que dejes atrás la timidez y te concentres en lanzar tu mejor mirada para que el hombre que te gusta caiga rendido a tus pies usando tus ojos:
> Maquillaje
Opta por algo más natural, enfócate en las pestañas y un sutil delineado que hagan que tu mirada sea más profunda y penetrante.
> Busca su mirada
Lo primero que debes hacer cuando sabes que la persona que te gusta esta cerca de ti, es buscar su mirada y esperar a que responda a tu llamado visual. Haz que pueda sentirla para que se dé cuenta que se encuentran en el mismo espacio y tienen la oportunidad de que el contacto no quede solamente en unas miradas.
> Transmite
Recuerda que los ojos son las ventanas del alma y gracias a ellos puedes expresar muchas cosas: odio, atracción, tristeza, alegría, etc. Así que en cuanto cruces miradas con tu chico intenta transmitir felicidad o gusto por estar viéndolo.
> Arquea la ceja
Las novelas han hecho de este gesto toda una demostración de sensualidad. ¿Cuántas veces no has visto a las protagonistas de películas o telenovelas hacerlo cuando están coqueteando?
> Sonrisa
En caso de que seas una per- sona poca expresiva y el chico no tiene ni idea del motivo por el que lo estás viendo, acompañar tu mirada con una sonrisa sutil será de mucha ayuda.
> Mantén la mirada
Si el contacto visual ya es demasiado obvio y tu chico captó el mensaje y te vio, una buena técnica es mantener la mirada, darle el tiempo necesario para que capte todos los mensajes.
> Aparta la mirada
Después de lo anterior, puedes apartar la mirada con mucha sutileza, para que no se sienta acosado o dejes un poco de misterio. Seguramente estará en su mente todo el día el momento en el que establecieron contacto visual y, por supuesto, cuando este acabó.
> Sutileza
Seguramente el chico te llama mucho la atención, sin embargo, lo mejor es que evites devorarlo con la mirada, ya que puedes ocasionar que se sienta intimidado. Opta por el juego de miradas, sin que estas sean morbosas.
“QUIERO QUE CAIGA RENDIDO A MIS PIES USANDO MIS OJOS” IRMA LA ATREVIDA