¡UNA TRISTEZA! SIN NADA QUE SACAR EN LA PRESA HUITES
A FINALES DEL 2020 MURIERON MILES DE LOBINAS POR LAS EXTRACCIONES DESMEDIDAS DE AGUA A LA OBRA HIDRÁULICA Y ESOS DÍAS HUBO QUIENES SE LLEVABAN HASTA 200 KILOS
Sin nada que pescar para mitigar el hambre de sus familias, menos para vender, ni turismo al cual prestarle el servicio de paseos en lancha, y con la presa Luis Donaldo Colosio con un almacenamiento a poco más de 15 por ciento de su capacidad total a causa de la intensa sequía, así de sombrío es el panorama al que se está enfrentando el sector pesquero en el municipio de Choix. “Estamos a pan y agua”, fueron las contundentes palabras del pescador Pedro Rábago, que reflejan el desespero en el que viven más de 350 choicenses que se dedican a la captura de mojarra en la presa más grande de Sinaloa, pero que hoy tiene los niveles más bajos de almacenamiento en más de una década, y lo que es peor, sin peces que atrapar por una masiva mortandad que se dio a finales del 2020 por la extracción abundante y persistente del líquido que duró varios días.
> Tristeza económica
Según cuenta Pedro, a finales del 2020 empezó el martirio para los pecadores de la sierra sinaloense, cuando sus ojos captaban imágenes aterradoras los días 28 y 29 de diciembre con la muerte de miles de lobinas que luchaban por un poco de oxígeno luego de que el nivel de agua bajara considerablemente a causa de las extracciones que se estaban realizando. Pedro, quien tiene 20 años como guía de turistas y toda una vida de pescador, señala que para su desgracia padece de enfermedades, entre ellas una trombosis que le sobrevino hace tres años luego de golpearse contra una lancha, y de las secuelas de un infarto al corazón a principios de este 2021. Por eso es que su hijo Kevin lo acompaña y es quien, con su guía, se dedica a la pesca en esta temporada de sequía extrema.
> Tiempos mejores
Pedro Rábago recuerda que era un adolescente cuando le tocó observar todo el movimiento de personas y económico que se generó a raíz de la construcción de la presa Huites, así como su puesta en marcha en 1995. A partir de ese año los choicenses se adentraron en una actividad hasta el momento poco conocida, la pesca, y hasta diciembre del 2020 todo caminaba a la perfección, aseguró, pues los pescadores están bien organizados, había producto en la presa y el presidente municipal de Choix, Omar Gill Santini, los provee de dos inspectores permanentes para la vigilancia, pero todo se derrumbó con las extracciones de finales del 2020 y la sequía.
Por ahora, dijo, hay esperanza con el anuncio que hizo Omar Echavarría, presidente de la Federación Regional de Sociedades Cooperativas Las Taunitas, de repoblar la presa con producto del Centro Reproductor Alevines, un proyecto que los mismos pescadores y su líder no han dejado caer, para el que cada uno de ellos con sacrificios aporta 250 pesos mensuales.
“Pero qué bueno fuera que el Gobierno federal nos apoyara, porque sí nos prometen pero no se concreta la ayuda, y así como le extrajeron agua a la presa, que entiendo era necesario, pero acá también habemos quienes vivimos de esto, de la pesca, nuestro sustento y el de nuestras familias, y con la mortandad que hubo a finales del 2020 y la sequía, de qué vamos a vivir. La verdad es que ya no hallamos la puerta. Nos urge que las autoridades nos ayuden y también urge que llueva ya para que la presa empiece otra vez a irse para arriba y tengamos frente a nosotros un panorama más optimista”.
“YO TOMO UNAS PASTILLAS QUE ME CUESTAN MÁS DE MIL PESOS, SON DE POR VIDA Y LA CAJA ME DURA UN MES. DE DÓNDE VAMOS A SACAR PARA EL ALIMENTO, EL AGUA, LA LUZ, PASTILLAS. ES UNA TRISTEZA ESTO QUE ESTAMOS VIVIENDO”, SE LAMENTA MIENTRAS VE A LO LEJOS PEDRO RÁBAGO PESCADOR