Se declara Durango sin recursos para pagar tierras por donde pasa autopista
Los gobiernos anteriores “dieron largas” a los ejidatarios y no dejaron recursos Los afectados pedirán a la SCT que investigue el destino del fondo económico creado para ello
El gobierno de Durango no tiene recursos para pagar 43 por ciento de la superficie utilizada en la construcción de la autopista Durango-Mazatlán, es decir, los primeros 100 kilómetros, a los ejidatarios de Estación de Otinapa y San Carlos, quienes llevan dos administraciones estatales exigiendo su dinero.
El subsecretario de Gobierno de la entidad, José Luis López Ibañez, reconoció que a la administración estatal le corresponde desembolsar ese porcentaje, pero no cuentan con recursos suficientes.
“Para nosotros va a ser algo muy fuerte tener que pagar lo que otros no hicieron, porque no tenemos dinero y no vemos que hayan dejado algo para este fin”, manifestó López Ibañez. Aseveró que los gobiernos anteriores “les dieron largas (a los ejidatarios) en el pago”, a pesar de que en un convenio de 2002 entre los gobiernos federal y estatal se determinó que el costo de expropiación de las tierras correría a cargo de este último; incluso se habló de un fondo económico para ese fin. “Pero hasta ahora nosotros no hemos encontrado nada”, dijo.
Mencionó que en un diálogo con los inconformes “se dieron cuenta de que nunca se pagó un peso a los dueños de la tierra donde se construyó la autopista Durango-Mazatlán”.
Especificó que en fecha reciente atendió a los campesinos de Estación de Otinapa y San Carlos, quienes exigen su retri- bución tras emitirse, el 28 de febrero, el decreto de expropiación de 50 hectáreas, el cual determinó pagar a 8 mil 350 cada una (83 centavos por metro cuadrado).
Los afectados, en tanto, aseguraron que pedirán a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes que investigue qué se hizo con el fondo económico creado entre 2003 y 2005 para pagar las tierras por donde pasaría la autopista, que se supone el gobierno del estado se encargaría de administrar.
La autopista Durango-Mazatlán consta de 230 kilómetros y fue puesta en marcha en su totalidad en octubre de 2013 por el presidente Enrique Peña Nieto.
En 2002 los gobiernos federal y estatal acordaron que este último haría la retribución