Humberto Moreira, libre por la impunidad y la ayuda de Calderón, insiste López Obrador
El ex jefe del Ejecutivo federal es responsable de la violencia en Tamaulipas, señala
El presidente del partido Morena, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que se retirará de la política si “el corrupto” gobernador panista de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, le comprueba haber recibido dinero de su antecesor, el priísta Javier Duarte, hoy detenido en Guatemala, y que hará lo mismo si se le demuestra que el ex presidente panista Felipe Calderón no perdonó al ex mandatario de Coahuila Humberto Moreira.
Ayer, durante su cuarto y último día de gira por Coahuila, López Obrador acompañó al candidato de Morena al gobierno estatal, Armando Guadiana Tijerina, e hizo notar en Twitter que Calderón no procedió contra Moreira, quien dejó una deuda estatal superior a 35 mil millones de pesos.
“Además de corrupto, Calderón es como un sepulcro blanqueado; dice el hipócrita que no exoneró a Moreira. ¡Estoy buscando al que se lo crea!”, publicó en su cuenta de Twitter.
De igual manera, pidió a los coahuilenses no creer en el candidato a gobernador del PAN, Guillermo Anaya, quien ofreció que de ganar las elecciones el 4 de junio encarcelará a Humberto Moreira. Explicó que senadores panistas, entre ellos Anaya, denunciaron al hoy ex priísta y el mismo gobierno federal de su correligionario Calderón lo exoneró.
“En octubre de 2012 Humberto Moreira pidió a su socio (el entonces presidente electo) Enrique Peña que arreglara con Calderón su situación, para que antes de que terminara su sexenio fuera exonerado, que no quedara ninguna denuncia pendiente en su contra.
“Felipe Calderón ordenó a la Procuraduría General de la Re- pública que exonerara a Humberto Moreira”, insistió.
Aseguró que Moreira, “por la impunidad, está libre completamente y se da hasta el lujo de ser candidato (a diputado de representación proporcional por el Partido Joven, de registro estatal); eso solamente en México sucede”.
También responsabilizó al ex presidente Calderón de la violencia en Tamaulipas, pues “impuso una estrategia equivocada de querer resolver el problema de la inseguridad sólo con medidas coercitivas y con el uso de la fuerza, pero sin atender las causas”.