El júnior ha peleado con mejores rivales que el Canelo, afirma Rodolfo Chávez
A Julio César Chávez no le gana Saúl Canelo Álvarez, dice convencido Rodolfo Chávez, entrenador y tío del júnior. El ánimo en el equipo del boxeador sinaloense está en su punto más alto, producto del trabajo que hicieron en el campamento del Centro Ceremonial Otomí.
“No le gana porque el junior ha peleado con mejores rivales que Canelo”, desafía a unos días de que se enfrenten el 6 de mayo en Las Vegas. “No es que minimice la carrera de Canelo, es bueno, pero sus rivales siempre han sido de menor peso que él. Por eso digo convencido que el júnior gana, porque gana esta pelea”.
El peso no será problema, asegura Rodolfo, porque han trabajado con mucho cuidado bajo la mirada atenta de Ángel Heredia, el preparador físico que afirma que el júnior no sólo llegará a las 164.5 libras pactadas para el combate, sino que lo hará con comodidad y un buen margen de recuperación.
“Obvio que el júnior ya estaba un poco enfadado de estar encerrado en el campamento del Otomí, pero cumplió con entusiasmo y ahora sólo quiere que sea sábado para despachar este pendiente”, cuenta Rodolfo.
“La llegada de Ignacio Beristáin al equipo fue muy acertada, porque trajo la disciplina que necesitaba el júnior y todos nos adaptamos de maravilla.”
No sólo le impuso la disciplina como condición, sino además le enseñó algunos imprescindibles para el boxeo. Trabajó de forma insistente en evitar golpes, en caminar y, sobre todo, olvidar esa confianza un poco kamikaze de que la fortaleza le permite absorber el castigo en la quijada.
“Verán a un júnior distinto el día de la pelea, porque el respeto que le inspira Beristáin y el entusiasmo por esta pelea lo hicieron que se comprometiera muy en serio”, dice Rodolfo. “Beristáin le impuso su personalidad y eso se va a notar”.
A esto hay que agregar la pelea del hermano del júnior contra el del Canelo. El sábado, Omar Chávez noqueó en dos episodios a Ramón Álvarez, lo que imprimió mayor ánimo en el equipo del sinaloense y calentó la rivalidad para el pleito del 6 de mayo.
Ángel Heredia, el preparador de Chávez junior, también está motivado por el resultado del trabajo que sostuvieron en el campamento del Centro Ceremonial Otomí.
“Me sorprende la motivación de Chávez, porque superó las expectativas tanto mías como las de Nacho Beristáin, lo vemos no sólo fuerte y rápido, sino además convencidos de que después del pesaje estará todavía mucho mejor”, afirma.
Heredia confía en que la planificación para el peso de Chávez le permitirá tener una mejor recuperación después del pesaje, por lo que no perderá fortaleza y ganará en explosividad. En comparación con Canelo, a quien –considera– al subir de peso le costará sostener la velocidad con el avance de los episodios.
“Canelo subirá lo más que su cuerpo le permita, pero no podrá sostener los niveles aeróbicos sobre el cuadrilátero; quizás se vea rápido en los primeros asaltos, pero terminará por afectarle”, plantea Heredia. “Creo que en el equipo de Óscar de la Hoya pensaron que Chávez no daría el peso, “lo vamos a agarrar anémico y lo vamos a madrear”, pero no será así. Se llevarán una gran sorpresa porque el júnior se rodeó de gente profesional, quisieron jugar con fuego y se van a quemar”.