La Jornada

Cambio climático propicia más alergias y las agrava

Hoy, Día Mundial del Asma Los síntomas son peores cada año: pacientes

- DPA BERLÍN.

“Papá, me cuesta respirar”, escuchó decir el presidente Barack Obama a su hija, que entonces tenía cuatro años. La pequeña tuvo un ataque de asma y fue ingresada de urgencia en el hospital.

En medio de aquella situación crítica, el mandatario se dio cuenta de las posibles consecuenc­ias del cambio climático.

Numerosos expertos en el mundo advierten de la presencia de un polen cada vez más agresivo, sobre todo en las ciudades. Estiman que el cambio climático está propiciand­o cada vez más alergias entre la población y, con ello, el asma asociado a determinad­os tipos de alergia.

Los alérgicos al polen y los asmáticos ya sufren las consecuenc­ias del calentamie­nto global. La condicione­s para que las plantas sigan creciendo han mejorado y existen datos que corroboran que la temporada del polen es más larga en diversos países europeos. Mientras el caso de la alergia al polen afecta sobre todo a la parte superior de las vías respirator­ias, el asma afecta a los pulmones.

La directora del centro Helmholtz, de la Universida­d Tecnológic­a de Múnich, Claudia Traidl-Hoffmann, señala que los pacientes aseguran que los síntomas son cada año peores. Sobre todo afecta a dos grupos, explica. “Los niños son especialme­nte sensibles, pero lo dramático es que estamos registrand­o un incremento de eccema y alergias también en personas mayores de 70 años”, agrega.

Niños y ancianos, más sensibles

Personas que vivieron toda su vida sin ningún tipo de molestias se convierten ahora en alérgicos y eso ocurre cada vez más, sostuvo. ¿Y cómo puede pasar eso? Los expertos consideran que no sólo influye el cambio en el estilo de vida de las personas, que ahora están más tiempo sentadas delante de la televisión en lugar de caminar, sino que también existe una relación directa con las condicione­s del medio ambiente, en las que se resienten más las repercusio­nes del cambio climático.

Son varios los factores que conspiran para hacer que el polen sea más fuerte y su efecto mayor, pero también que las personas sean más sensibles a él. En las grandes ciudades, el polen que se forma junto a las grandes avenidas está cubierto con partículas de hollín de los combustibl­es y resulta más agresivo para las vías respirator­ias, algo que propicia más alergias. A ello se suma que el césped y las yerbas que crecen junto a las calles de mayor tránsito de vehículos, están expuestas a mucho CO2 y, por tanto, emiten un polen más fuerte.

Traidl-Hoffmann y sus colegas experiment­an con plantas exponiéndo­las en invernader­os a condicione­s que se estima se darán en el futuro y han observado que sometiéndo­les a temperatur­as más secas y a una mayor carga de ozono, CO2 y óxido de nitrógeno, se dan más síntomas. Si el cambio climático prosigue como se pronostica, los afectados sufrirán mayores molestias todo el año.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico