Tras viacrucis arriban a Hermosillo 300 migrantes
La mayoría son centroamericanos y se dirigen a EU; enfrentan asaltos, hambre y sismos
Trepados en el techo del tren conocido como La Bestia, más de 300 migrantes centroamericanos llegaron a Hermosillo, Sonora, luego de viajar 3 mil kilómetros desde su salida de Chiapas, recorrido en el que enfrentaron asaltos, inclemencias climatológicas, hambre y la tragedia de los terremotos.
El grupo de indocumentados originarios de Guatemala, Nicaragua, Salvador y Honduras, se unieron al viacrucis Guadalupano Migrantes Solidarios, desde Tapachula, Chiapas, para viajar acompañados de sus paisanos y crear un grupo para evitar la violación a sus derechos humanos en su paso por México.
Durante dos semanas, narraron, permanecieron en la zona de desastre que dejaron los terremotos del 7 y 19 de septiembre en nuestro país, donde hombres y mujeres de todas las edades ayudaron a salvar vidas, efectuar la limpia de escombros, levantar muros y repartir comida entre los damnificados.
Irineo Mújica Arzate, director de la Organización Pueblo Sin Fronteras, relató que cuando sucedieron los terremotos de septiembre pasado, los migrantes salieron a Juchitán desde los albergues para rescatar a las víctimas, como una muestra de solidaridad y agradecimiento por las atenciones que han recibido de la población de Ixtepec.
“Nos agarró el temblor en lugares donde nos han ayudado por años a nosotros y a nuestro familiares, como el padre José Alejandro Solalinde Guerra, gente con la que hemos trabajado y que ahora los veíamos destrozados, lo menos que podíamos hacer era socorrerlos”, cualquier obstáculo que se le presente. Su prioridad es darle una vida de calidad a su hija y esposa. “He recorrido miles de kilómetros, me he enfrentado a asaltantes, he pasado calores, fríos y hambre. Nunca había vivido un sismo, pero ni eso, ni el desierto, ni los muros cegarán mis prioridades”, platicó a La Jornada.
Los cientos de migrantes marcharon ayer en una caravana por el bulevar Eusebio Kino hasta llegar a las vías del tren, a fin de esperar su próxima salida con destino a Caborca, Sonora, con la misión de continuar su viaje a Estados Unidos.