Derraman 500 litros de ácido sulfúrico en carretera de Sonora
Una fuga en un camión cisterna cargado con 15 mil litros de ácido sulfúrico provocó un derrame la noche del miércoles en el tramo Ímuris–Cananea de la carretera federal número 2.
Elementos de la Policía Federal, división Caminos cerraron el tránsito en ambos sentidos de la vía durante siete horas, mientras se efectuaban trabajos para eliminar el compuesto corrosivo de la cinta asfáltica.
El incidente ocurrió en el kilómetro 147 de la carretera Puerto de Cananea, a la altura del municipio de Ímuris, frente al entronque que lleva a la comunidad de Santa Cruz. El camino debió mantenerse cerrado desde las 21 horas del miércoles hasta las cuatro de la madrugada de este jueves.
De acuerdo con fuentes policiacas, el tractocamión que arrastraba una cisterna en la que se transportaba el ácido pertenece a la empresa Exprés Milac.
Los informantes aseguraron que sólo se derramaron aproximadamente 500 de los 15 mil litros de ácido sulfúrico que llevaba el vehículo y comentaron que es frecuente que pasen por esa vía pipas con dicha sustancia, utilizada en procesos de extracción de metales pesados efectuados en las minas del norte de Sonora.
Añadieron que fue el mismo chofer del tractocamión quien notó un desperfecto en el remolque, y al revisar la unidad se percató de que el derrame del químico había comenzado y por ello de inmediato reportó el percance a autoridades federales.
En respuesta se activaron protocolos para evitar desastres ambientales, al tiempo que la Policía Federal clausuró el tránsito durante las maniobras.
Al cierre de esta edición ni la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente ni la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales se habían manifestado sobre este percance.
El peor desastre ambiental en la historia en México ocurrió en Sonora. El 6 de agosto de 2014, 40 millones de litros de lixiviados de sulfato de cobre acidulado producto de las operaciones de la mina Buenavista del Cobre, propiedad de Grupo México, de Germán Larrea, se derramaron y llegaron al río Sonora, lo que afectó a casi 23 mil personas.