La Jornada

En penales, Real Madrid echa al City de la Liga de Campeones

- ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONS­AL MADRID

Adiós al campeón. El Manchester City fue eliminado en cuartos de final de la Liga de Campeones por el Real Madrid. El conjunto merengue y el Bayern Múnich, los dos equipos más laureados de Europa, se clasificar­on a las semifinale­s de la Champions, en un par de partidos en los que cayeron eliminados los últimos representa­ntes de la Liga Premier: los Citizens, que perdieron en penales, y el Arsenal, por 1-0.

Para llegar a la ansiada final de Wembley del próximo 1º de junio, sólo quedan, además de los dos clasificad­os de ayer, el París SaintGerma­in y el Borussia Dortmund, con lo cual no habrá ni un equipo inglés, a pesar de que está considerad­a como la liga más competitiv­a y prestigios­a del mundo, entre otras cosas por la inversión multimillo­naria en varios equipos de fondos procedente­s de Qatar, Arabia Saudita o Emiratos Árabes Unidos.

Sin duda, el partido de la noche fue el que disputaron el Real Madrid, con 14 Copas de Europa en su historia, contra el equipo más poderoso del momento, el Manchester City, que, en teoría, tiene los jugadores más desequilib­rantes y el entrenador más cotizado, Pep Guardiola. El resultado del partido de ida había sido un empate a tres, por lo que los dos conjuntos salieron con cautela en los primeros minutos del partido.

El equipo madridista decidió por orden de su entrenador, el italiano Carlo Ancelotti, ceder la pelota y la iniciativa a sus rivales, defendía todo el tiempo en su propio campo, a la espera de algún error en el pase o algún robo de pelota que les permitiera armar un contragolp­e fulminante a sus rapidísimo­s y virtuosos delanteros.

El plan salió redondo: en el minuto 11, después de un control soberbio de Bellingham tras un trazo largo de la defensa madridista, quebró a la zaga inglesa con un pase al hueco para Vinicius, quien desde la banda derecha centró raso a su compatriot­a Rodrygo que remató de forma errática en su primer disparo y estrelló el balón en el portero, pero con la fortuna de que el rebote volvió a dejarle la pelota a los pies. Y ahí ya no perdonó: resolvió con violencia al extremo izquierdo de la portería y la pelota cruzó la línea de gol, poniendo contra todo pronóstico al Real Madrid por delante de la eliminator­ia.

A partir del primer tanto, el partido se convirtió en un dominio casi absoluto del City, que tuvo la posesión de la pelota más de 70 por ciento y que, sobre todo, llegaba con peligro desde las bandas, ya sea a través de Grealish, de De Bruyne, de Bernardo Silva o de Doku. Pero la defensa del Real Madrid era una muralla, resistía el asedio con un despliegue físico absoluto y con grandes intervenci­ones de su portero, el ucranio Lunin, quien a la postre se convirtió en uno de los grandes protagonis­tas de la noche.

El plantel español mostró su perfil más débil en el ataque y decidió encerrarse atrás, sin apenas crear ocasiones de peligro. La insistenci­a de los ingleses rindió sus frutos al 75, cuando una jugada con varios rebotes llegó finalmente a su jugador de más calidad, el belga De Bruyne, quien igualó la pizarra.

Lucha sin cuartel

El resto de la segunda parte fue una lucha cuerpo a cuerpo por cada espacio, por cada balón, y sin posibilida­d de caer en el error. El partido terminó y dio paso a la prórroga, que cambió ligerament­e el guion, con un Real Madrid presionand­o un poco más arriba del campo e intentando con más atrevimien­to algún contragolp­e. Pero ni uno ni otro lograron cruzar la red. Así que, con el tiempo agotado, el árbitro pitó el final, lo que suponía que la eliminator­ia más igualada e intensa del torneo y, quizá de los últimos años, se iba a tener que decidir desde el fatídico punto de penal.

Los primeros en disparar fueron los jugadores del Manchester City, a través del argentino Julián Álvarez, quien metió su gol con calidad. Después le tocó el turno al madridista Luka Modric, el croata y el más veterano del equipo, quien tiró muy flojo y mal colocado, con lo que el arquero lo detuvo. Todo parecía estar en favor de los ingleses; sin embargo, después apareció el joven portero Lunin, quien detuvo los disparos de Bernardo Silva y de Kovacic, mientras los madridista­s Bellingham y Lucas Vázquez los habían metido sin problema. Después el jugador del Manchester, Foden, metió su cobro, al tiempo que el capitán merengue, Nacho, hizo lo propio. Así que llegó la ronda final, que obligaba al City a marcar y así lo hizo el portero del equipo, Ederson, quien tras su disparo agarró el balón, lo abrazó y miró al cielo ante lo que podía ser el último penal del partido. El responsabl­e de tirarlo por el equipo español fue el defensa central alemán Rudiger, quien ajustó el disparo al poste izquierdo, en un sitio imposible de llegar para el guardameta. Era gol y se había clasificad­o el Real Madrid, venciendo así al Manchester City, que no perdía en su casa en un partido europeo desde 2018.

En el otro partido de ayer, el Bayern Múnich venció al Arsenal, gracias a un gol de Kimmich y después de un partido dominado por el conjunto alemán.

Las dos semifinale­s ya están despejadas: por un lado se enfrentará el PSG contra el Borussia Dortmund y, por otro, el Real Madrid contra el Bayern Múnich, en busca del boleto para la final de Wembley.

 ?? Foto Afp ?? ▲ Rodrygo celebra su anotación, la cual había puesto en ventaja al conjunto merengue en el primer tiempo.
Foto Afp ▲ Rodrygo celebra su anotación, la cual había puesto en ventaja al conjunto merengue en el primer tiempo.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico