El cafecito que cambió mi vida
a la crisis por el Covid-19. Crecimos muy rápido. Ahora tenemos listas de distribución, un programa semanal de radio, un boletín en Substack, campañas en redes sociales y en junio lanzaremos un podcast con historias de puentes humanos construidos cuando otros edifican muros.
Nuestro corazón late en La Hora del Cafecito, una hora diaria de conversaciones intensas en WhatsApp sobre noticias, polémicas, política, salud, inmigración y hasta cotilleo del espectáculo. Hablamos de todo. No le tenemos miedo a los temas difíciles, no le sacamos la vuelta a la controversia ni nos intimida el discrepar. Llevamos, hasta hoy, 609 cafecitos de más de 160 mensajes cada uno. Eso sí es dialogar.
No somos un medio de comunicación tradicional ni queremos serlo. Le apostamos al periodismo hiperlocal, a las charlas, a un reporteo constante con retroalimentación, a la transparencia, a invertir tiempo a la escucha, a la verificación de datos, al trabajar en español, a empoderar la binacionalidad y la biculturalidad. Le apostamos a y por la gente. Le apostamos a las colaboraciones y a fortalecer a otros como Prensa Arizona, Onda 1190, El Sol de Hermosillo y más. Eso nos ha llevado a Stanford y a la Universidad CUNY en Nueva York, a que escriban de nosotros en Harvard, The New Yorker, The New York Times, el Washington Post, Aljazeera y más. Y todo empezó conmigo y ahora llega hasta donde jamás imaginé, gracias a ti.
Así que cuando te digan que una persona no puede cambiar el mundo, tómales la mano y muéstrales la magia de los eslabones humanos. No los sueltes. Enséñales que de uno a uno vamos tejiendo historias, amistades, redes de apoyo, familias comunitarias, barrios orgullosos, conversaciones informadas y una nueva narrativa que tiene nuestras manos, nuestros rostros, nuestros idiomas y acentos. Luego invítales un café. Escucha. Lee. Deja la libreta y apaga la grabadora. Permítete oír, ser y acompañar sin filtros. Y cuando entiendas que no son ellos y nosotros, que somos uno mismo, empieza a escribir, crear, preguntar, investigar y reportear. Así se cambia el mundo; así se mueve el barco, así se hace un puente, así escribimos nuestra historia.