SEXO PARA SONREÍR
Lo tiene claro: sexo = amasijos de carne poliformes y sudorosos en posturas obscenas. Así, el tapatío José Ignacio Solórzano, mejor conocido como Jis, lleva desde los 80 dibujando de una forma burda sus pensamientos más desvergonzados y provocativos, eso sí, en geniales trazos. No hay mejor prueba que las colaboraciones con su amigo, el también dibujante Trino, en la famosa tira El Santos. Su último libro Sexo, publicado en Sexto Piso, rebasa los límites de lo íntimo. Le preguntamos si esto le ha traído problemas.
Jis, ¿has desayunado papaya? —Noto tu acento extranjero... ¿sabes lo que significa papaya en México? Por eso te lo pregunto… —(ríe) A eso sabe la Reina, a papayita. Pues, curiosamente, sí la desayuné, con unos huevos rancheros. ¿Y mientras dibujas comes papaya? —Nada, cero, ni siquiera agua. ¿Alguna señora te ha pegado con la bolsa por lo pervertido de tus libros? —Todavía no, por suerte. ¿Pero sí te aceptas como pervertido? La vida me ha pervertido de maneras extrañas. Mi guía fue mi hermana mayor, Diana. Me presentaba amigas y nos decía que nos diéramos besitos. Era tímido y me sentía presionado. ¿El sexo está sobrevalorado? —Es algo que está ahí, luego se esconde y aparece con otra forma: banalizado o sobrevalorado. Pese a eso, yo no me considero especialmente caliente, eso sí, tengo amigos que lo son mucho más que yo. ¿Eres el santurrón del grupo? —Santurrón no. Me considero promedio. Pero luego me doy cuenta de que el promedio es bastante calenturiento (ríe con mucha fuerza). ¿Qué te molesta durante el sexo? —Cuando no estás ahí, porque estás desaprovechando un momento sagrado. Es un sacrilegio. ¿Dibujas todo lo que piensas? —Narro lo que siento y pienso, pero, a veces, me censuro. Al hablar de cosas tan cercanas puede haber personas que se sientan señaladas o expuestas. Al dibujar el día a día, he tenido problemas con mi esposa, por ejemplo: “No tienes derecho a sacarme en tus dibujos”, me dice cuando se enoja. ¿Has dormido en el sofá, pues? —Todavía no. Mi esposa me apoya, pero tiene una relación ambivalente con mi trabajo. Este nuevo libro es de los 80 para acá, así que salen otras parejas, amantes… también es una expresión de las cosas que lo calientan a uno. ¿El hombre es simio sin conciencia? —Ya es tiempo de empezar a tenerla.