ABSOLUTA INMERSIÓN
“Ninguna cantidad de palabras perfectamente escritas o fotografías idealmente compuestas pueden tener mayor influencia en una decisión que la absoluta inmersión”. George Mitchell es la mente maestra detrás de Circos VR, compañía especializada en crear experiencias de realidad virtual para promover hoteles y destinos, guiando así a los posibles clientes para tomar una decisión basada no sólo en el aspecto racional, sino en la conexión emocional que provoca la interacción con el lugar.
En este mundo tecnológico y digital, ¿cómo conseguimos persuadir hacia una decisión? — Las historias que contamos son nuestra moneda más valiosa, y éstas vienen, directamente, de la experiencia. Las tecnologías pueden ayudarnos a crear experiencias que se conviertan en historias que contemos más de una vez y recordemos por el resto de nuestras vidas. —En este esfuerzo por crear experiencias, ¿qué te hizo apostar por la realidad virtual?
— Si volteamos ver la ciencia ficción, descubrimos que uno de los deseos de la humanidad ha sido, durante mucho tiempo, crear un mundo virtual en el que podamos existir. Con los últimos avances digitales, la idea de por fin ser capaces de crear nuevos mundos movió algo dentro de mí y decidí apostar por un negocio basado en esta nueva posibilidad. —¿Cuál es la fortaleza de la RV?
— Sin duda alguna, la conexión emocional. Especialmente en el plano comercial porque la decisión de elección y compra no es racional, sino meramente emocional.
—¿Dónde entra el storytelling? — La tecnología tiene todo el poder de ayudarnos a mejorar el mundo, pero para eso tiene que conectar con nuestra humanidad. Ahí es donde entra el storytelling. Para crear una experiencia de RV, es tan necesaria una parte como la otra. —¿Qué tan lejos ha llegado la realidad virtual y hacia dónde la ves ir?
— El crecimiento de la RV no ha ido en línea recta, sino que hemos visto crecimientos explosivos seguidos de pérdidas y, de nuevo, una explosión. Hoy nos enfrentamos a la falta de contenido porque su creación requiere, todavía, una gran especialización. En un futuro próximo, no creo que sufra una mayor transformación. Más bien lograremos entender hacia dónde va la tecnología, reduciremos la necesidad de especialización y, así, lograremos cumplir la promesa de absoluta inmersión.