FOY SE PONE PUNK
CON EL MUNDO A SUS PIES POR SU PAPEL DE ISABEL II EN THECROWN , CLAIRE FOY SE METE EN LA PIEL DE UNO DE LOS PERSONAJES FEMENINOS MÁS DEMANDANTES PARA UNA ACTRIZ: LA HACKER LISBETH SALANDER.
La actriz británica Claire Foy deja la corona y el papel que le ha dado la fama mundial a un lado, para transformarse completamente e interpretar a la hacker más famosa del celuloide, Lisbeth Salander, en la cinta The Girl in the Spider’s Web.
Hay un sello distintivo en el trabajo actoral de Claire Foy: su personal e inigualable capacidad de transmitir las emociones de sus personajes sólo con gestos. Claire no necesita diálogos ni especificaciones de los directores. La actriz británica entra en la psique de sus roles y le basta con un movimiento de ceja, un tic o simplemente con la mirada fija y afilada para comunicar.
Esta adaptabilidad no es algo que aprendiera en la Universidad John Moores de Liverpool, donde estudió Drama y Cinematografía, sino algo emergido de su mente. Foy sufre de ansiedad y la ha trabajado tan bien que la emplea para imprimir un carácter distinto a cada interpretación. Las conductas que la aquejaban durante sus episodios se convirtieron en ademanes, en estoicismo. Así se ha transformado en Lisbeth Salander en
The Girl in the Spider’s Web; en la esposa del astronauta Neil Armstrong en First Man, y en la reina Isabel II de Inglaterra en la serie de Netflix The
Crown, por la que ganó el Globo de Oro como mejor actriz de serie dramática de televisión en 2017.
Esta mujer, de 34 años, ha redefinido el término “camaleónico” y, más bien, se ha mimetizado con las personas que interpreta. Aun cuando se imaginaba como periodista y nunca pensó en la actuación, Foy se ha convertido en un ejemplo de cómo una actriz se puede fusionar con sus personajes hasta pasar desapercibida. Así ocurre cuando encarna a una integrante de la realeza o a una hacker violentada de forma física y emocional, en busca de venganza contra un gobierno corrupto, como se le ve en la nueva adaptación cinematográfica de la novela escrita por David Lagercrantz.
“SÉ LO SUFICIENTE COMO SER HUMANO PARA ENTENDER PORQUÉ L IS B ET H ACTÚA COMO LO HACE, PORQUÉ LE RESULTA TAN DIFÍCIL ENTENDERLAS EMOCIONES DE LOS DEMÁS “.
¿Cómo comenzó tu sueño de ser actriz?
Nunca soñé con ser actriz. Nunca deseé nada en particular, más allá de lo que tuviera frente a mí. Tampoco crecí pensando que tenía un montón de posibilidades en la vida. Llegó una edad en la que supe que tenía cierta inclinación hacia las artes, pero no conocía a nadie que hubiera ido al conservatorio o que se hubiese entrenado para ser actor. No entendía muy bien lo que eso implicaba, pero luego me enteré de que existían los conservatorios y pensé que tenía que probar. Y eso fue lo que hice.
¿Cuándo te diste cuenta de que éste era un trabajo con el que ibas a poder vivir?
Tres o cuatro años después de haber empezado [en 2008], aunque incluso en ese momento tenía mis dudas. Pensaba que todo se iba a terminar en el momento menos pensado. Uno siempre piensa de esa manera, porque todo depende de los gustos y en esta industria eres tan buena como el éxito que tuvo tu último trabajo. Y siempre he sido consciente de que tu actuación puede resultar terrible si estás cansada o no puedes dar lo mejor de ti. Se pueden olvidar de tu nombre en cualquier momento.
Para The Girl in the Spider’ s Web ,¿ qué tan difícil fue convertirte en Lisbeth Salander?
Terminé de rodar First Man en diciembre y luego tuve muy poco tiempo para prepararme. En mi cabeza tenía más o menos claro lo que iba a hacer. Ya me había leído todos los libros [de Stieg Larsson y David Lagercrantz], y me parecía que no me alcanzaba con saber que esta hacker usa un mohawk y tiene muchos tatuajes. Quería tratar de entender cuál era el significado de todo eso y por qué quería que la gente dudara antes de acercársele.
¿Cómo hiciste para crear un personaje tan alejado de quien eres tú?
Sé lo suficiente como ser humano para entender por qué Lisbeth actúa como lo hace, por qué le resulta tan difícil entender las emociones de los demás e, incluso, las propias. Lidiar con las relaciones humanas es una de las cosas más difíciles para ella. No tiene problemas para hackear una computadora, pero mantener una conversación con la persona que tiene enfrente, sobre todo si le está haciendo preguntas, es la peor circunstancia que le puede tocar. Es que nunca ha tenido una buena
interacción con otro ser humano, porque siempre ha sido violada de una manera o de otra.
¿Qué tan importante era encontrar el aspecto físico exacto que debía tener este personaje?
Tenía que hacer muchas escenas de acción, por lo que iba a tener que cuidarme. Pero, además, en las novelas queda claro que Lisbeth es muy delgada porque no come muy bien. Sin embargo, no quería adelgazar más de la cuenta, ya que no era una actitud responsable con mi cuerpo y tampoco me parecía esencial para crear al personaje. En cambio, sentí que me tenía que ver fuerte y musculosa, por lo que tuve que hacer mucho ejercicio.
Antes protagonizaste TheCrown, ¿en qué medida te cambió la vida?
Esa serie transformó la mirada que yo tenía sobre esta profesión. No ha modificado la que tengo sobre la familia real [británica], pero sí mi forma de pensar en la gente que está en esa institución. Creo que el hecho de ser figuras públicas no es la realidad de quiénes son en su vida cotidiana. Ahora, cada vez que observo a alguien que es una figura pública, sé que una cosa es lo que muestran para afuera y que su vida personal es otra.