Adrián Fernández
Adrián Fernández cuenta, de viva voz, lo que es competir en esta carrera.
Cómo vivió Le Mans.
Hay que vivir Le Mans en junio. La competencia más importante del automovilismo de resistencia se lleva a cabo a mitad del año. Luego de una larga trayectoria —principalmente en Estados Unidos—, tenía la espinita de participar en las 24 Horas de Le Mans, una prueba importante para los mexicanos por la gran tradición y los éxitos de los hermanos Rodríguez. Por fortuna, tenía al Fernández Racing como equipo de fábrica de Acura (marca de Honda) en la American Le Mans y propusieron ir a las 24 en 2007. Se contrató al equipo local Zytek y, tanto Honda como yo, nos involucramos con parte del personal.
A pesar de que corrí varios años en Europa, no conocía la pista, por lo que estudié mucho antes de llegar. Vi videos de carreras, fotos y, curioso, la película Le Mans con Steve McQueen, que es impresionante; me sirvió mucho, pues he vivido cosas similares.
Los simuladores no eran tan exactos como ahora, así que hice un recorrido en bicicleta y tomé fotos de los puntos más importantes. Solo 20% de Le Mans es un circuito permanente, el resto son caminos y carreteras entre los pueblos, por lo que aunque llegara antes, no se pueden transitar. Hacer ese recorrido fue crucial, porque las 24 son una carrera tan veloz, que si no tienes bien tus referencias de frenada es muy fácil cometer errores.
Esa primera aventura fue significativa, porque califiqué en primer lugar y logramos terminar en segundo de la categoría. Fue una prueba muy dura. Recuerdo que me tocó el turno de la madrugada, la transición de la oscuridad al amanecer, algo sumamente peligroso porque tienes esa agüita que surge en el asfalto, por el frío, y al salir de las eses tuve un despiste que por suerte no pasó a mayores.
Recordé que mi primera carrera en la historia fueron las 24 Horas de México, en el vocho de mis tíos, y en aquel entonces había que cuidar todo del auto. Ahora las piezas son muy resistentes, los frenos y el motor aguantan, así que te enfrentas a una prueba de sprint, pero de 24 horas, con un peligro extra: la velocidad de los autos de
“LOS SIMULADORES NO ERAN TAN EXACTOS, POR LO QUE RECORRÍ LA PISTA EN BICICLETA Y TOMÉ FOTOS DE LOS PUNTOS MÁS IMPORTANTES DEL CIRCUITO”.
la categoría LMP1, que no sabes qué tan cerca o lejos vienen. Es una pista con tanta historia, que lo primero que ves son las curvas Porsche, las que infunden más respeto, pues entras en la penúltima velocidad. Por la noche, ya que estás afinadito y la pista tiene mucho agarre, son más controlables. Aunque un error, lo hemos visto, es catastrófico.
Pero no es lo único a lo que te enfrentas, también está el cansancio. Es agotador no solo para los pilotos que compartimos auto y turnos, sino para los mecánicos e ingenieros. En ese manejo nocturno, tras cinco vueltas dejé de escuchar las indicaciones de mi pit. Llamé por radio y no tenía respuesta. Media vuelta después mi ingeniero contestó, se había quedado dormido unos minutos viendo el monitor. A diferencia de nosotros, ellos no tienen motorhome para descansar. Pero todo vale la pena al correr por Dunlop Bridge y Tertre Rouge, ver las curvas históricas y realizar algún rebase, fue como marcar con una palomita mi bucket list. Pocas sensaciones en mi vida como manejar por la noche en Le Mans: eres tú, el coche y la oscuridad. Entras en trance y todo lo haces bien, repites tus mejores tiempos y es tu momento épico… es perfecto.
En una ocasión manejé un total de 11 horas y, al momento que recibí la bandera a cuadros, abrí la puerta y vi a mi equipo en la barda, fue el sentimiento más bonito de la competencia. Aun sin alcanzar podio, culminar las 24 es una hazaña. A menudo me preguntan cuál es mi pista favorita y, aunque me fascinan Indianápolis, Elkhart Lake o Spa, Le Mans está en mi top. Tras dominar las series mexicanas, corrió en la Fórmula Ford 1600 en Inglaterra. Luego de ser campeón de la F3 en México, dio el salto a Estados Unidos para ser subcampeón de la serie CART. Compitió en Nascar Busch, fue campeón de ALMS y sumó dos podios en las 24 Horas de Le Mans.