TRANSPORTE DIGITALIZADO
Tecnología para reducir los costos.
El sismo de magnitud 7.1 de septiembre de 2017 sacudió algo más que inmuebles en la Zona Metropolitana del Valle de México. Cambió paradigmas al interior de empresas con operaciones en el centro del país, entre ellas las relacionadas con el transporte de pasajeros, como Lipu, la división de transporte escolar y personal de Traxión, compañía mexicana de autotransporte y logística.
Paradójicamente, el mayor riesgo para sus operaciones no estaba en la escasez de vialidades que ese día servían como corredores peatonales para la gente que deseaba llegar a sus hogares. La intermitencia del suministro eléctrico en la zona centro del país asechaba la operación de los cincos servidores que la empresa tenía –hasta ese entonces– en su centro de monitoreo en Naucalpan, Estado de México, y con generar pérdidas económicas de consideración.
De acuerdo con un estudio de Uptime Institute Intelligence, consultoría estadounidense en infraestructura de TI, la pérdida de energía fue la causa principal de las interrupciones en la operación de los centros de datos en 2019, mientras que un estudio de Ponemon Institute de 2016 estima que el costo mínimo por un paro no programado en un centro de datos es de 926 dólares por minuto y el máximo alcanza los 17,244 dólares. Según el documento, el monto depende de la relación que tiene el centro de datos en el negocio y considera el daño a la reputación que genera la pérdida de confianza de los clientes.
Ante el peligro, Elías Dana, director de Lipu, y su equipo optaron por migrar la información a servidores virtuales de Amazon, que además de ser confiables –según el directivo– permite aumentar la capacidad de almacenamiento de forma sencilla y sin mayores inversiones.
Ricardo Rentería, gerente general de Amazon Web Service (AWS), menciona que la nube tiene la flexibilidad para que el usuario configure, desde su cuenta, el tamaño y la tecnología necesaria, algo difícil de lograr con un servidor físico.
Parte de la estrategia
La adopción de esta tecnología robusteció el plan de desarrollo que Traxión fijó para Lipu tras adquirirla a fines de 2016, y a partir del cual la empresa digitalizó una buena parte de la cadena de servicio.
Elías Dana refiere que antes se invertía gran parte del recurso humano para monitorear manualmente las rutas, por lo que la captura de reportes por esa vía era insostenible para el plan de expansión que tenía la compañía. La flota de la división
de transporte de pasajeros de Traxión, por ejemplo, pasó de 3,617 unidades en el cuarto trimestre de 2016 a 5,373 al primer semestre de 2019 y aumentó sus operaciones de 11 a 17 estados.
Para lograrlo, la compañía se hizo de los servicios de Traffilog, empresa israelí, que suministró equipos de telemetría, GPS y sistema anticolisiones a las unidades de Lipu. La telemetría recopila toda la información generada por las computadoras que tiene el autobús a través de un equipo llamado Can Bus, según Fernando Arduna, presidente de Traffilog Latinoamérica.
Esta herramienta, afirma, permite conocer el estado del camión en tiempo real –si está detenido, por cuánto tiempo, o si salió de la ruta–, la velocidad a la que se desplaza y otros parámetros que permiten el seguimiento físico-mecánico como la temperatura del aceite y agua.
El equipo permite el envío de la información a la nube de Amazon donde permanece disponible para los analistas de los 17 centros de monitoreo que tiene Lipu alrededor del país.
“Podemos detectar con prevención los diferentes códigos de error que puede tener un camión, como una alta de temperatura, la falta de niveles de anticongelante, y eso nos permite tener mantenimientos preventivos y evitar daños mayores a las unidades”, comenta Dana. Al mismo tiempo, el equipo permite recolectar datos sobre la forma de conducir de los operadores y, a partir de ahí, realizar capacitaciones sobre las áreas de oportunidad que tiene cada operador. Gracias a esto la compañía ha registrado ahorros anuales de entre 10% y 15% en gastos de combustible, de acuerdo con el directivo.
Aprovechar la tecnología
Los especialistas en tecnología de Lipu han capitalizado los datos disponibles en la nube de AWS y la trazabilidad que da la tecnología de Traffilog para desarrollar aplicaciones móviles que dinamicen el servicio, entre ellas una orientada a mejorar la experiencia de usuario.
Esta consiste en una app que permite a los clientes finales de Lipu –trabajadores y estudiantes–conocer el status del vehículo que los llevará al trabajo o la escuela (similar a la espera de una app de transporte privado). Otra aplicación permite a los conductores documentar fotográficamente anomalías de las unidades y orientar al equipo de mantenimiento en la revisión.
Traffilog también ha instalado el sistema anticolisiones y el Sistema Avanzado de Asistencia al Conductor (ADAS) en 30% de la flotilla de Lipu. Esta tecnología envía alertas al conductor sobre
La tecnología de Traffilog nos permite detectar los diferentes códigos de error que puede tener un camión y con ello tener mantenimientos preventivos y evitar mayores daños en las unidades. Elías Dana, de Lipu.
Estos reportes son atendidos y canalizados por el personal a dos tipos de aplicaciones:
A) Una del área de mantenimiento para que atienda alguna falla en el camión.
B) Y otra para alertar al usuario final sobre dónde está el camión o a qué hora llegará a la parada.