HISTORIETAS MEXICANAS: NOSTALGIA IMPRESA CON RISAS Y SENSUALIDAD
Sus páginas brindaron a muchas personas momentos emocionantes hace algunas décadas. Hoy hacemos un repaso por algunas de las más exitosas
Cuando se piensa en cómics, de inmediato vienen a la mente superhéroes creados por grandes marcas, principalmente estadounidenses. Sin embargo, México no se queda atrás; sus historietas también poseen calidad, variedad de temas y hasta recuerdos del pasado. En este pequeño recorrido destacamos algunas de las más conocidas y que son parte de un tiempo en el cual el papel y tinta eran la mayor fuente de entretenimiento.
NOVELAS INMORTALES
Para mucha gente fue la entrada a la literatura. Este producto de Novedades Editores imprimió desde los años 70 obras de escritores clásicos como Julio Verne, Daniel Defoe, Víctor Hugo, Alejandro Dumas y muchos más. También contenía información biográfica del autor. Tuvo 900 números y una hermana a todo color: Joyas de la literatura.
LIBRO VAQUERO
Fue el primer cómic de bolsillo en salir, en 1978, y es muy famoso debido a su contenido erótico y romántico. Las mujeres se llevan gran parte del protagonismo, aunque solo como objeto de deseo o conflicto de los vaqueros y los nativos. Ha incluido en el desarrollo de sus tramas a personajes como el escritor Jordi Soler y el editor Yuri Herrera. Aún continúa publicándose.
CAPULINITA
Gaspar Henaine “Capulina” tenía su propio multiverso. Antes de la versión mini, el cómic se hacía en gran formato y también aparecía Viruta (Marco Antonio Campos). Al separarse el dúo se lanzaron Las Aventuras de Capulina; Foto Capulina, que fue “la primera fotonovela para niños”; y Aventuras de Capulinita, conocido simplemente como Capulinita, un material de lectura obligado de la infancia.
HERMELINDA LINDA
Quizá la recuerdes por sus dos películas protagonizadas por Evita Muñoz “Chachita”. Originalmente se llamó Brujerías y fue uno de los cómics mexicanos más exitosos en los años 60. Abordaba las aventuras de una bruja que, pese a la falta de atractivo físico, se valía de su inteligencia y hechizos para transformarse en una mujer joven y sensual. a lo largo de sus páginas jamás faltó el humor negro, el doble sentido y las mujeres semidesnudas. Posteriormente, el nombre cambió a Aventuras de Hermelinda Linda.
VIDEORISA
Prohibido por padres y madres ochenteros asustados de su contenido lleno de doble sentido. A pesar de ser considerada como “muy fuerte y vulgar”, con un lenguaje soez y una estética sencilla, sus sátiras eran gloriosas; Mazinger “Jeta”, La guerra de las garnachas, ¡Raza Sésamo! y muchos otros conquistaron a toda una generación.
MEMÍN PINGUÍN
En la actualidad sería imposible que saliera tanto por su argumento como por sus personajes. Su creadora, Yolanda Vargas Dulché, describía a Memín como “un negrito simpático”, aunque tenía varios defectos y rasgos distorcionados. El cómic, cuyo primer número vio la luz en 1943, también era conocido como Pingüín.
LA FAMILIA BURRÓN
Sus historias eran un reflejo de las familias mexicanas (desde que comenzó en 1948), especialmente en su situación económica y sus aspiraciones de clase.