COMER SIN CARNE: CONSEJOS PARA TENER UNA TRANSICIÓN SALUDABLE

Esta dieta te puede servir para expandir tus horizontes alimenticios y probar plantas y frutos nuevos. Y no, no te hará falta proteína

Dejar la carne y basar tu alimentación en plantas. ¿Lo has pensado? Probablemente no imagines la vida sin una hamburguesa o un filete, pero es posible. Hay muchas opciones en el mercado para que no extrañes la proteína animal y tu dieta sea saludable.

Si decides hacerlo, no nada más debes prepararte para cambiar el menú, también para enfrentar los cuestionamientos por ya no comer carne.

Dorothy Lerch Huacuja los ha enfrentado desde el día que decidió cambiar su dieta y dejar la proteína animal por tres razones: salud, por el maltrato de los animales y por el medio ambiente.

“Todo mundo te cuestiona, como si fuera una decisión mala o equivocada”. Una de las objeciones que aducen apela al principal mito de que no se puede sobrevivir sin la proteína animal.

BALANCE Y EQUILIBRIO

Andrea Fabre Hurtado, health coach e ingeniera en alimentos con especialidad en nutrición, explica que sustituir la proteína que da la carne no es el problema, pues se puede obtener de alimentos como lentejas, garbanzos, nueces y algunas verduras.

La clave está en comer balanceadamente. Los nutrientes que sí pueden reducirse cuando se comen exclusivamente plantas son el hierro y la vitamina B12.

Ahora vienen los beneficios de dejar los alimentos de origen animal: tener mayor rotación de nutrientes, porque te obligas a darles una oportunidad a productos que antes no consumías y buscar, por ejemplo, unos que aporten fibra de buena calidad para una correcta digestión, explica.

“Expande tus horizontes de alimentación, porque cuando estás acostumbrado a una dieta acabas comiendo lo mismo siempre”.

Dorothy, abogada de profesión, dejó la proteína animal de un día a otro, pero con acompañamiento de especialistas. Lo cierto es que no siempre se tiene la fuerza de voluntad para hacerlo así; Andrea recomienda que el proceso sea gradual: intentar primero una dieta híbrida que combine proteína animal y plantas.

“Dejar todo de golpe puede ser muy duro tanto física como emocionalmente”.

TESOROS DE LA TIERRA

• La milpa no solo es maíz. Ella nos da una variedad de cultivos: quelites, calabaza, huitlacoche y más. Te hablamos aquí del aporte nutricional de estas superfoods necesarias en la cocina mexicana.

• Conocido como “la trufa mexicana”, el huitlacoche es un hongo parásito del maíz. Pero lejos de verlo como una plaga, para la cocina mexicana es un ingrediente muy apreciado. Una quesadillita de huitlacoche te aportará ácidos grasos esenciales (Omega 3 y Omega 6), aminoácidos, fibra, fósforo y vitamina C.

• El huauzontle está formado de ramilletes de pequeñas flores verdes comestibles. Las encuentras de