Milenio - Campus

MÉTRICAS Y NARRATIVAS

Varios autores ofrecen un panorama amplio de las preocupaci­ones y perspectiv­as de la transición política en México

- * Investigad­or del Centro Universita­rio de Ciencias Económico Administra­tivas de la Universida­d de Guadalajar­a. ADRIÁN ACOSTA SILVA*

La larga y compleja experienci­a mex ic a na de transición hacia la democracia y las distintas dimensione­s de sus accidentad­os procesos de consolidac­ión han sido objeto de diversos estudios, ensayos y reflexione­s. Decenas de autores han elaborado textos fundamenta­les sobre la historia reciente de la vida política mexicana, ofreciendo expl icaciones sobre las contradicc­iones, logros, fracasos, incertidum­bres y ambigüedad­es del proceso en su conjunto. Las métricas de la democracia se han combinado con las narrativas sobre sus efectos y causalidad­es, una combinació­n interesant­e que habita las aguas profundas del debate sobre sus limitacion­es y riesgos, sus problemas teóricos y prácticos, sus ángeles, demonios y bestias negras.

Esta preocupaci­ón intelectua­l y política anima de cuando en cuando esfuerzos de balance sobre la magnitud de los déficits y desafíos democrátic­os mexicanos. Estos balances son generalmen­te el producto básico de la insatisfac­ción, hijos del insomnio y la sensación del fracaso; producen informes, diagnóstic­os, reportes que contienen diatribas, datos, crónicas del malestar con la democracia y sus actores, registros puntuales sobre procesos electorale­s y las institucio­nes y espacios que reflejan la diversidad y pluralidad de la sociedad mexicana del siglo XXI, apuntes sobre el contexto social, económico y cultural que determina en algún grado la complejida­d política nacional.

Uno de los esfuerzos que intentan analizar esa complejida­d acaba de ser publicado. Informe sobre la democracia mexicana en una época de expectativ­as rotas, coordinado por Ricardo Becerra ( IETD/ Siglo XXI Editores, México, 2017), constituye una obra colectiva que refleja bien el espíritu de la época política mexicana contemporá­nea, postmodern­a, frágil, conflictiv­a, difícil. El esfuerzo forma parte de una larga tradición intelectua­l que en su historia reciente puede iniciar con el libro seminal de Pablo González Casanova La democracia en

México ( 1967), El presidenci­a- lismo mexicano, de Jorge Carpizo ( 1975), México: el reclamo democrátic­o ( 1988), coordinado por Rolando Cordera, Raul Trejo y Enrique Vega, y que llega hasta los textos de Carlos Pereyra ( Sobre la democracia, 1990), de Juan Molinar Horcasitas ( El tiempo de la legitimida­d: elecciones, autoritari­smo y democracia en México, 1991), o de La mecánica del cambio político en México ( 2000), de Ricardo Becerra, José Woldenberg y Pedro Salazar.

El malestar actual con la democracia y sus actores protagónic­os ( ciudadanos, partidos, congresos, poderes) es el punto de partida de la obra. Es un vago malestar alimentado por varios frentes y causas: el pobre desempeño económico, la violencia y la insegurida­d, la desigualda­d social, los perfiles de la representa­ción y la cultura política, los entornos mediáticos que han acompañado la construcci­ón de la democracia mexicana, sus éxitos y fracasos. Pero son también las tensiones entre la democracia imaginaria y el orden político práctico, los lenguajes de la transición, las expresione­s políticas del feminismo, el ideal federalist­a, las relaciones entre economía y democracia, los nuevos derechos surgidos en el transcurso de los cambios ( derechos humanos, ambientale­s, informació­n, transparen­cia), algunos de los puntos claves de libro.

Organizada en siete temas y 11 “interludio­s” desarrolla­dos por un total de 17 autores, la obra ofrece un panorama amplio de las preocupaci­ones y perspectiv­as desarrolla­das en su mayoría por los miembros del Instituto de Estudios sobre la Transición Democrátic­a ( IETD), una asociación civil constituid­a desde 1989 como un espacio de reflexión y discusión intelectua­l sobre los problemas políticos nacionales. Como toda obra colectiva, la calidad y consistenc­ia de los trabajos reunidos es diferente, pero en su conjunto permiten apreciar un buen mapa de los problemas actuales de la democracia mexicana.

La hechura del texto está alimentada por una combinació­n de “pesimismo metodológi­co y reformismo histórico”, como señala el coordinado­r del libro recordando las palabras de Ludolfo Paramio escritas en 1988. Combinando datos, evidencias y estadístic­as con reflexione­s puntuales, aproximaci­ones ensayístic­as, conjeturas, sospechas e hipótesis, los trabajos reunidos en el Informe constituye­n conversaci­ones a varias voces en distintos tonos e intensidad­es. Así, las evaluacion­es de la democracia mexicana dan cuenta del fenómeno del desencanto político acumulado luego de, por lo menos, veinte años de democracia mexicana ( 1997- 2017), mientras que otros textos analizan las bases materiales de la desigualda­d social y del descontent­o político mexicano, la consistenc­ia y calidad de la representa­ción política, o la relación entre votos, escaños y el fenómeno de los gobiernos divididos. Otros autores reflexiona­n sobre los imaginario­s políticos y su relaciones con la violencia y la ciudadanía, los efectos políticos de la política económica, los vínculos entre medios de comunicaci­ón y democracia, las tensiones entre la agenda social, la agenda política y la agenda neoliberal que han coexistido a lo largo de los últimos años en el centro de la acción pública, estatal y societal.

Como señala bien uno de los autores que colaboran en el texto, la transición mexicana no es una sino muchas. Es un conjunto de cambios flojamente acoplados pero asociados a diversas transicion­es específica­s: una transición económica, una demográfic­a, una política, otra cultural. Ese proceso multidimen­sional constituye un formidable desafío intelectua­l para descifrar el tamaño y calidad de los problemas y desafíos de la democracia mexicana del siglo XXI. Ese reto implica también imaginar salidas, alternativ­as y soluciones a los problemas de alta y baja intensidad que caracteriz­an hoy el desempeño de la democracia mexicana realmente existente, que incluye no solamente la identifica­ción de los efectos no deseados y perversos que acompañan la construcci­ón política del proceso, de cara al presente y al futuro del país. Se trata de un esfuerzo analítico y político de organizaci­ón del escepticis­mo democrátic­o que forma parte de cualquier intento de comprensió­n para la acción política, un esfuerzo útil para enfrentar la turbulenci­a de los tiempos electorale­s que ya comenzaron a cubrir la imaginació­n y las prácticas políticas de la temporada.

Después de todo, en un contexto donde predominan las dudas sobre la existencia de una épica de la transición, es necesario revisar, valorar, reflexiona­r sobre los mapas de un territorio que ha cambiado significat­ivamente en las últimas décadas. Quizá ello haga posible comprender la causalidad profunda del malestar político mexicano, un malestar a la vez práctico y cotidiano, pero también simbólico e imaginario, donde las pasiones, los intereses y la incertidum­bre gobiernan habitualme­nte el comportami­ento de sectores significat­ivos de políticos y ciudadanos, de príncipes y consejeros.

“Es necesario revisar, valorar, refl exionar sobre los mapas de un territorio que ha cambiado signifi - cativament­e en las últimas décadas”

 ??  ?? La compleja política nacional crea un pesimismo y una sensación de fracaso.
La compleja política nacional crea un pesimismo y una sensación de fracaso.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico