Encuentros, música y libertad
Amigos, la música. Este arte sonoro sin el cual la vida no tendría color, es nuestro tema de hoy. Mucho se ha dicho sobre este sector de la cultura, que sin música la vida sería un error; que la música es para el alma lo que la gimnasia para el cuerpo; que en la música puede refugiarse el alma para arrobarse y sentirse a sí misma; en fin que el que escucha música experimenta como su soledad se puebla, son expresiones de pensadores como Nietzsche, Platón y Hegel, respectivamente, las cuales nos dan pie a nuestra conversación del día de hoy, en el cual se conmemora el Día Internacional de la mujer… y que mujer más seductora que la armonía musical.
Todo arte — permítaseme la opinión— es una forma de conocimiento, es una manera de descubrir el mundo y develarlo, por ello la educación, más aún, los sistemas educativos, las políticas educativas deben estar dirigidas a acendrar el alma de los ciudadanos que están descubriendo el mundo; es decir, fomentar el carácter sensible de nuestros jóvenes y niños. También mucho se ha dicho sobre la Reforma Educativa, emprendida por la actual administración, la cual contempla un Nuevo Modelo Educativo, donde la cultura no sólo está incluida sino que cada vez está jugando un papel menos marginal y más protagónico. Veamos.
Bajo la batuta del músico venezolano Gustavo Dudamel y el compositor mexicano Arturo Márquez, el pasado domingo 4 de marzo en el Palacio de Bellas Artes, 50 alumnos de la Orquesta y Coro de Música Tradicional Mexicana de la Secretaría de Educación Pública ( SEP), se integraron a otros 231 niños y jóvenes en un concierto multinacional denominado “Encuentros. México y las Américas unidos a través de la música”, según dio a conocer la dependencia educativa a través de un comunicado.
La verdad sea dicha, este concierto se logró gracias a la profunda amistad, resultado del intercambio en el terreno filosófico, humano y artístico entre dos grandes artistas: Gustavo Dudamel y Arturo Márquez; así lo expresó previo a este concierto multinacional, el coordinador del Sistema Nacional de Fomento Musical ( SNFM) de la Secretaría de Cultura ( SC), Eduardo García Barrios. De manera ampliada, podemos decir que este concierto es resultado del trabajo conjunto entre la Fundación Gustavo Dudamel, la Fundación Arturo Márquez, la SC y la SEP.
Arturo Márquez
“Alas a Malala”, obra del compositor sonorense Arturo Márquez ( 1950), actualmente es el himno del Movimiento Nacional de Agrupaciones Musicales Comunitarias que impulsa y apoya el SNFM de la SC. Márquez abrió el concierto del pasado domingo, con una obra pulida y dedicada a Malala Yousafzai ( Premio Nobel de la Paz 2014). Márquez ha reconocido que Malala “despierta las conciencias de los seres humanos” en materia de educación, además alerta sobre el peligro que representa la ignorancia. Alas dignas a Malala
Alas dignas de esperanza
Alas dignas de confianza
Su palabra vuela y llama
Con su canto prende el alma
Sin temor levanta vuelo su mensaje llega al cielo
Son algunos de los versos que canta el coro infantil en esta composición que se ha convertido en el himno de batalla de la SC, a través del SNFM. “Sólo el que sabe es libre, y más libre el que más sabe... Sólo la cultura da libertad... No proclaméis la libertad de volar, sino dad alas; no la de pensar, sino dad pensamiento”, aseguraba Miguel de Unamuno ( 1864). Dudamel, imbuido en el arte musical y en el espíritu libertario, citó al pensador ibérico previó al concierto cuando aseguró: “La libertad que hay que dar al pueblo es la cultura”.
Gustavo Dudamel
Francamente emocionado, el músico y director venezolano, Gustavo Dudamel ( 1981), previo al concierto, reconoció que la vez anterior que había estado en el Palacio de Bellas Artes, fue a los 13 años cuando participaba como violinista en la Orquesta Nacional Infantil de su país, 22 años después, regresó a México para dirigir a la mítica Orquesta Filarmónica de Viena; y a estos 300 niños y jóvenes principalmente mexicanos pero también músicos nóveles de Canadá, Estados Unidos, Puerto Rico, Venezuela y Argentina. Este afamado director internacional, reconoce que él es resultado de un sueño que en un principio parecía imposible: la conformación de Orquestas infantiles y juveniles.
“Ustedes son el alma de un continente, de una América. No de tres Américas ni dos; de una América”, les dijo el director venezolano a los 300 niños y jóvenes reunidos en el escenario principal del Palacio de Bellas Artes, ante ese crisol de talento multinacional. Dudamel fue enfático con los jóvenes y con el auditorio: la música une, la música rompe fronteras, elimina muros, nos hace iguales.
Para los integrantes de la Orquesta y Coro de Música Tradicional de Mexicana de la SEP como para todos los participantes, quienes el día anterior tuvieron la oportunidad de escuchar un ensayo de la Filarmónica de Viena, esta fue una experiencia única que refinará su gusto por la música, no sólo para consumirla sino para interpretarla y crearla. El trabajo mancomunado entre SC y SEP que hacen posible la estrategia “Cultura en tu escuela” está dando frutos que, cualquier espíritu humanista, difícilmente negaría abrazar.