LLEGÓ LA HORA.
Después de un sinfín de declaraciones, cuestionamientos, condiciones, amenazas, solicitudes, negociaciones en el terreno legislativo y a nivel federal, el Proyecto de Presupuesto de Egresos 2019 se presenta mañana o el sábado a más tardar. Y con ello se van a disipar muchas dudas en torno a los requerimientos que demandan las universidades públicas estatales, y la educación superior en su conjunto. Y también, por lo que se perfila, se van a concretar muchos de los miedos que los rectores y muchos sectores académicos han advertido. Un presupuesto que destine recursos suficientes para garantizar un incremento por encima del nivel inflacionario, y cubra la insuficiencia de fondo que ahoga a 10 de esas instituciones, sería una sorpresa. Por ello, la batalla para intentar un reajuste va a ser, desde ahora lo percibimos, muy difícil y desgastante. Quienes saben de estos menesteres, entienden que se debe tejer muy fino para evitar rupturas o conflictos que pueden solucionarse en la mesa presupuestal.