EL NUEVO ENEMIGO DE
Una minoría de activistas dentro de las principales universidades de este país comunista se ha convertido en una amenaza
A30 años de la masacre de la plaza de Tiananmén, el gobierno chino ha lanzado una campaña de represión y hostigamiento contra un nuevo movimiento estudiantil. Aun no se ha visto los niveles de violencia de 1989, cuando cientos o miles de manifestantes— documentos desclasificados fijan la cifran de muertos en 10,454— fueron acribillados por el ejército chino. Sin embargo, el gobierno de Xi Jinping parece determinado a aplastar a cualquier desafío a su autoridad. para estudiantes universitarios de todas las carreras.
No obstante, Xi, quien es considerado el líder más poderoso desde Mao, ve el crecimiento en el activismo estudiantil como una amenaza que debe ser extirpada. Su gobierno acusa a los grupos marxistas de incurrir en actividades políticas ilegales— es decir, cualquier acción no autorizada por el Partido Comunista. En particular, los activistas han chocado con las autoridades al promover la sindicalización de los trabajadores en fábricas en todo el país. Los sindicatos independientes son ilegales en China y aquellos trabajadores que quieran formar un sindicato deben registrarse con la Federación de Sindicatos de Todo China, un grupo aliado con el gobierno que típicamente toma partido con los dueños de las fábricas, según reportó The Guardian.
La ofensiva gubernamental empezó en julio de 2018, cuando activistas estudiantiles organizaron una campaña de apoyo a trabajadores huelguistas en la ciudad sureña de Shenzhen, según reportes de prensa y grupos de derechos humanos. Unos 30 activistas, la mayoría de ellos universitarios provenientes de la capital, fueron detenidos o desaparecidos. Después, en noviembre, grupos de hombres desconocidos detuvieron y golpearon a una docena de activistas en por lo menos cinco ciudades chinas, según The Guardian.
Uno de los detenidos, el líder estudiantil Zhang Shengye, fue “secuestrado” dentro del campus de la Universidad de Pekín, según reportes de prensa. El siguiente mes, la policía china desmanteló violentamente a una manifestación por parte de un grupo marxista en la misma universidad. Los estudiantes estuvieron protestando por las detenciones de sus compañeros, quienes, afirmaron, no habían tenido acceso a abogados desde sus detenciones en julio.
La universidad, localizada en Pekín, es una de las dos instituciones mejor ranqueadas del país. También tiene una larga historia de activismo izquierdista y fue sede del Movimiento del 4 de Mayo de 1919, que sembró las semillas para la Revolución Comunista 30 años después. Hoy la universidad está al centro del conflicto ideológico entre los estudiantes y el gobierno de Xi.
Otros activistas han sufrido represalias al denunciar casos de abuso sexual por parte de profesores de algunas universidades de élite. En el caso más sonado, Yue Xin, una estudiante de la Universidad de Pekín y activista del movimiento # MeToo, enfrentó hostigamiento por parte de