Milenio Edo de México

Negocio oscuro: santeros y médicos buscan huesos humanos

Ilegalidad. Pese a ser un delito federal, con hasta cinco años en prisión, el cráneo es de las partes más solicitada­s y costosas, al igual que el fémur; el mercadeo de restos es una realidad

- ALEJANDRA GUDIÑO, VALLE DE MÉXICO

Es práctica común entre santeros, estudiante­s de medicina o de odontologí­a, acudir de manera clandestin­a a los cementerio­s en busca de cráneos y restos óseos, piezas que son comerciali­zadas hasta en mil 500 pesos, según la misma, relataron encargados de los panteones en Ecatepec y Coacalco, quienes pidieron omitir sus identidade­s. Por un lado, acotaron, entre los posibles clientes están personas dedicadas a la santería, los cuales llegan a pagar dicha cantidad por un hueso, sin embargo, el valor varía. El cráneo, por ejemplo, es el de mayor costo y demanda, igual que un fémur. De acuerdo con un sondeo realizado entre alumnos de la FES Iztacala, indicaron que algunos optan por comprar las piezas, otros prefieren robarlas de lugares específico­s donde son resguardad­os por los responsabl­es de los camposanto­s. Comerciali­zar osamentas óseas es un delito federal que conlleva sanciones desde uno a cinco años en prisión “al que viole un túmulo, un sepulcro, una sepultura o féretro, y al que profane un cadáver o restos humanos con actos de vilipendio, mutilación, brutalidad o necrofilia”, según los artículos 280 y 281 del Código Penal Federal. Esta práctica viola otras disposicio­nes como la Ley General de Salud, entre ellos el capítulo V, que en diversos artículos establece que “los cadáveres no pueden ser objeto de propiedad, siempre serán tratados con respeto, dignidad y considerac­ión”. Además quedan señalados los plazos “mínimos” en los que han de permanecer los cuerpos dentro de las fosas y en tanto esto no suceda “sólo podrán efectuarse las exhumacion­es que aprueben las autoridade­s sanitarias así como las ordenadas por las judiciales, o por el Ministerio Público, previo el cumplimien­to de los requisitos correspond­ientes”. En la misma forma, se indica que “para la utilizació­n de cadáveres, o fragmentos de ellos, por parte de personas conocidas con fines de docencia e investigac­ión se requiere el consentimi­ento del disponente”. Los infractore­s pueden lograr su libertad mediante una fianza porque no están dentro de los crímenes considerad­os como graves, según especialis­tas en la materia consultado­s. Destacaron que se trata de una falta que pertenece al fuero común, lo cual quiere decir que únicamente afecta en forma directa a núcleos cercanos, como familiares y amigos del difunto. De acuerdo con un Trabajo de Divulgació­n difundido el 20 de marzo de 2015 por la AUNAM, obtener huesos de manera ilegal es una práctica muy extendida, tanto por estudiante­s como por individuos dedicados a la santería, quienes las adquieren “baratas” porque las réplicas oscilan los 4 mil pesos o más. Entre la gente que ejerce esta creencia se sabe que “El Palo” es una de las cuatro religiones de origen africano que aún se practican en diversos países de América Latina (principalm­ente en Cuba). Las otras tres son santería, abakuá y arará. Se cree en los poderes naturales y la veneración a los espíritus de sus ancestros. Olodumare es considerad­o como el dios supremo, creador de los hombres, el cielo y la tierra. Además está una vertiente llamada “Palo Mayombe”, esto es una de las derivacion­es de la citada anteriorme­nte, la diferencia es que resulta de una mezcla entre religiones como el chamanismo africano, los elementos del espiritism­o y la magia. Igual pueden utilizar huesos humanos, ya sea que los consigan a través de su compra, o bien, por robo, hechos que dan paso al tráfico de osamentas.

 ?? ANDRÉS LOBATO ?? Venderlos es delito federal pero no significa una falta grave, de acuerdo con la ley.
ANDRÉS LOBATO Venderlos es delito federal pero no significa una falta grave, de acuerdo con la ley.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico