Chatarra y azúcares encabezan las dietas
Nutrición. En las zonas rurales los adultos registran 67 % de casos por obesidad, mientras en las ciudades es de 69 %
Fiorella Espinosa, investigadora en Salud Alimentaria de la organización civil “El Poder del Consumidor” señaló que de acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de Medio Camino 2016, en las ciudades las personas tienden a consumir más carne, incluyendo aquella que es procesada, es decir, embutidos; aunque tienen una dieta más diversa consumen menos leguminosas.
Según la encuesta que publicó la Secretaría de Salud federal, en octubre de 2016, el consumo de comida no recomendable o chatarra y bebidas azucaradas es muy similar en la áreas urbanas y rurales.
“Esto se refleja en el estado de nutrición, en lo rural 67.5 por ciento de los adultos tienen sobrepeso y obesidad contra 69.9 por ciento en sitios urbanos. En los lugares rurales creció mucho esta cifra de 2012 a 2016, pues pasó de 61.1 a 67.5 por ciento”.
Además 73.3 por ciento de los escolares de 5 a 11 años que viven en áreas campesinas, por ejemplo, consumen más leguminosas y ascienden a 55.7 por ciento. En tanto la ingesta de frutas, carnes no procesadas y cereales dulces osciló entre 40 y 50 por ciento para ambos sectores; lo mismo que la comida rápida y antojitos mexicanos con 15 por ciento.
Asimismo 72 por ciento de los adolescentes de 12 a 19 años en localidades rurales comen más leguminosas con 59.7 por ciento.
Las carnes procesadas fueron adquiridas por 26.1 por ciento de quienes habitan en ciudades, ello en contraparte con gente de regiones rústicas, con 17.5 por ciento.
En el caso de los adultos de 20 años o más asciende a 88.4 por ciento la adquisición de carne; mientras que el otro sector tuvo 76.4 por ciento en leguminosas que los pobladores de las urbes con tan sólo 67.8 puntos.
También 64.8 por ciento de los citadinos toma más lácteos que las personas del campo donde el porcentaje es de 52.3. En el caso de las frutas que compran la mitad de los adultos en México, la urbanidad concentra 53.5 puntos contra 45.3 por ciento.
El huevo, por ejemplo, tiene una demanda de 50 por ciento en adultos y su consumo por localidad de residencia es muy similar. En tanto, 42.3 por ciento de esa misma edad come verduras y las ciudades encabezan con 44.5 por ciento contra 35.8 por ciento de los sitios rurales.
Fiorella Espinoza, maestra en Salud Pública, sostuvo que en general para los hogares más pobres siempre es mucho más significativo este rubro ya que gastan cerca de 40 por ciento en alimentos y 50 por ciento en bebidas, mientras que en los hogares más ricos la tendencia es diferente, 10 y 20 por ciento, respectivamente.
“El promedio nacional de ambos oscila en 35.2 por ciento”.
Por último destacó que el acceso al agua potable también es un factor que define el nivel de consumo de los líquidos azucarados, ya que en territorios de campo la falta de acceso obliga al consumo de refrescos o jugos, los cuales afectan el equilibrio de una dieta balanceada.