En un año, doble de tiraderos en el Edomex: R. Ojeda
Método inviable. “Estos sitios implican altos costos para su instalación”, detalló el ambientalista
Los rellenos sanitarios son inviables socialmente y no resuelven el confinamiento final de desperdicios domésticos, “por lo es necesario descartar esta tecnología, no solo por sus altos costos de instalación y mantenimiento, sino porque causan una permanente e irreversible pérdida de suelos”, sostuvo el ambientalista Ramón Ojeda Mestre.
Declarados obsoletos en países desarrollados, estos depósitos requieren de tecnologías y ubicaciones adecuadas, porque de lo contrario contaminan gravemente las aguas subterráneas.
Debido a su impacto negativo en el ambiente y a las repercusiones alignas en la salud, el especialista sugirió un manejo integral de estos desechos, crear conciencia para que reducir lo desperdiciado y transformar la basura.
En el caso particular del Estado de México, mencionó que existe un déficit de infraestructura para el confinamiento final de al menos 10 mil toneladas de basura orgánica, de las 16 mil to- neladas generadas cada día por los mexiquenses.
“Pretender instalar un relleno provoca oposición ciudadana, nadie quiere un basurero cerca de su casa”. Aunque la gran cantidad de estos sistios en la entidad reflejan su gran frecuencia.
Ramón Ojeda Mestre consideró que una de las tecnologías más avanzadas es la pulverización y mineralización de los desechos, por ser menos riesgoso para el medio ambiente, “los rellenos sanitarios son vulnerables por su membrana protectora, en la cual podrían producirse orificios y picaduras que permitirían la fuga de lixiviados y contaminar los mantos freáticos”.
El ambientalista advirtió la necesidad de concretar este sistema de incineración, pues sólo 60 por ciento, del total basura doméstica que se produce en el estado, se confina de manera adecuada; “en los últimos once meses se duplicó la apertura de basureros al aire libre, la entidad en septiembre de 2017 se tenía un censo de 32 sitio y a la fecha detectaron 64”, indicó la Secretaría de Medio Ambiente del estado.
La dependencia señalan que los tiraderos operan de forma controlada, y reconocen que en ellos se vierten diariamente más de ocho toneladas de desperdicios.