Fraccionamientos
Es muy interesante observar las diferencias tan visibles en el desarrollo de los fraccionamientos de la zona centro-poniente de Ciudad de México llevado a cabo por la compañía inmobiliaria De la Lama y Basurto.
En sus inicios los promotores y urbanistas siguieron el paradigma urbano de la ciudad-jardín. El arquitecto José Luis Cuevas se encargó en concreto de la colonia Hipódromo-Condesa, cuyo trazado partió de la antigua pista hípica cerrada desde los años
20, la cual permanece como un área verde central. De ella derivan otros círculos con parques pequeños para desarrollar viviendas y comercios con acceso a áreas abiertas de carácter público. El fraccionamiento Polanco-Chapultepec, comenzado en
1938, también siguió la estrategia comercial relacionada con el espacio verde público. Su trazado incluye el Parque de los Espejos (hoy Parque Lincoln) y amplias avenidas con paseos centrales arbolados, aunque en este caso, la proporción entre espacio público y privado es menor. En este desarrollo es muy importante la participación de dos arquitectos: Enrique Aragón y Francisco Serrano, quienes diseñaron el teatro al aire libre Ángela Peralta y el Pasaje Polanco, respectivamente, dos elementos de acceso público que contribuyen a la riqueza de los espacios comunes.
El cambio de paradigma se nota muy claramente en el trazado de las Lomas de Chapultepec, realizado también por el arquitecto Cuevas, en el cual se percibe claramente la influencia del diseño suburbano estadunidense, con grandes terrenos residenciales de tipo campestre, para la edificación de casas unifamiliares con jardines privados. Aunque existen grandes avenidas con áreas verdes, prácticamente no existen parques pú
blicos en el fraccionamiento, lo cual marca una tendencia hacia la prioridad del interés privado sobre el público, lo cual ha derivado en las urbanizaciones privadas de la actualidad.