“El martirio” de Arturo Zaldívar
“Acabó el martirio”, afirmó Arturo Zaldívar Lelo de Larrea al concluir el día de ayer su última conferencia de prensa como presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Lo dijo, medio en serio y medio en broma, antes de agradecer a las y los periodistas.
El mandato que dará por concluido el último día del año habrá sido uno muy difícil. La palabra “martirio” queda justa, porque ciertamente estuvo sometido a presiones sin precedente en la historia contemporánea del Poder Judicial mexicano.
Ser titular de la Corte, con AndrésManuelLó pez Obrador como cabeza de la República, no fue tarea sencilla. Debió enfrentar rudas presiones desde Palacio Nacional; entre las más desafiantes, la consulta popular respecto al juicio de los ex presidentes y la infausta iniciativa para prolongar su responsabilidad al frente de la Corte. También la embestida para remover a Jan in eOtál ora como presidenta del Tribunal Electoral y la renuncia de Eduardo Me dina Mora como ministro.
Sin ahorrarse raspones ni magulladuras, Zaldívar logró evitar un enfrentamiento desnudo y directo con López Obrador. Concediendo, contemporizando o de plano oponiéndose, consiguió que el Presidente respetara a la Corte y con ello el trabajo general de los tribunales.
Esto no impidió que la lengua confabulante de las mañaneras arremetiera contra los jueces, pero, más allá de despotricar contra ciertos actos de control sobre su gobierno, López Obrador apoyó la idea de que el propio Poder Judicial se reformara, en vez de imponer una iniciativa polarizante cuyo resultado habría sido peor de desafortunado en comparación con el que hoy está experimentando el Instituto Nacional Electoral.
A Zaldívar le quedan aún un par de asuntos cuya desembocadura volverá a oponer a los poderes Ejecutivo y Judicial. La próxima semana se resolverá la interpretación judicial sobre la prisión preventiva automática y el lunes 28 de noviembre la acción de inconstitucionalidad a propósito del decreto presidencial que, en 2020, otorgó facultades excesivas a las fuerzas armadas.
Zoom: si hoy la Corte puede plantarse firme frente a López Obrador, con
_ todo y su inhibitoria popularidad, es porque, durante “el martirio,” su ministro presidente logró maniobrar con habilidad política para asegurar, en conjunto, la autonomía e independencia del Poder Judicial.
Logró evitar un enfrentamiento desnudo y directo con AMLO