Trump impugna veto a su plan migratotorio
Frío encuentro con la canciller alemana, Angela Merkel, a quien evita dar la mano en público; EU no descarta “acciones militares” contra Norcorea
EAgencias/Washington l gobierno del presidente Donald Trump apeló contra la suspensión parcial decidida por un juez federal de Maryland del segundo decreto migratorio que prohíbe temporalmente la entrada a Estados Unidos de ciudadanos de seis países musulmanes.
El Departamento de Justicia presentó los documentos ante el Tribunal de Apelaciones del cuarto distrito, ubicado en Richmond (Virginia).
El pasado miércoles, dos jueces federales de los estados de Hawái y Maryland emitieron órdenes contra el decreto de Trump de prohibir la entrada a EU de habitantes de Somalia, Irán, Libia, Sudán, Siria y Yemen durante 90 días y de restringir el ingreso de refugiados durante otros 120.
Los jueces argumentan que las intenciones de Trump van contra la Primera Enmienda de la Constitución de EU al desfavorecer a ciertos individuos por motivos religiosos.
Si Washington hubiera apelado la orden de Hawái, el caso habría ido a la misma corte de apelaciones con sede en San Francisco, que rechazó una versión anterior.
Washington niega que sea una prohibición contra musulmanes y dice que la orden tiene como objetivo prevenir atentados en EU.
Reforzando su postura sobre el veto, Trump aseguró ayer que “la inmigración es un privilegio, y no un derecho”.
Tras haber tenido un frío encuentro en la Casa Blanca con la mandataria alemana, Angela Merkel, en su rueda de prensa conjunta, Trump dijo que ambos líderes coincidieron en “proteger a nuestros ciudadanos de aquellos que tratan de difundir el terrorismo, el extremismo y la violencia dentro de nuestras fronteras”.
Merkel no dudó en disentir, al afirmar que hay que “proteger las fronteras”, pero sin dejar de “tener en cuenta a los refugiados”.
El helado ambiente entre ambos quedó en evidencia cuando posaban para fotógrafos y camarógrafos en el Salón Oval y Los mandatarios concluyen su rueda de prensa en Washington. Trump evitó estrecharle la mano, pese a la insistencia de Merkel.
Al ser consultado en la rueda de prensa sobre su denuncia de haber sido espiado por Obama, Trump bromeó que él y Merkel tenían “una cosa en común”, ya que las comunicaciones de la dirigente fueron interceptadas por su antecesor.
La mandataria no se rió de la broma, pues Trump reconocía implícitamente que no tiene mucho en común con ella.
Ante una pregunta formulada a Merkel sobre los efectos de las políticas “aislacionistas” de EU, Trump intervino y dijo que es favorable para un comercio “justo” pero “nuestro comercio libre nos ha conducido a un montón de cosas malas”. El secretario de Estado, Rex Tillerson, advirtió que EU no descarta una acción militar contra Corea del Norte. Tillerson hizo estas declaración tras una visita a la zona desmilitarizada que separa las dos Coreas, y tras haber constatado el fracaso de 20 años de esfuerzos diplomáticos para detener el programa de armas nucleares de Pyongyang. “Desde luego que no queremos (...) un conflicto militar”, dijo antes de añadir: “Si (los norcoreanos) elevan la amenaza de su programa de armas nucleares a un nivel que consideramos requiera una acción, entonces esa opción está sobre la mesa (...), la política de paciencia estratégica se ha acabado”. Más tarde, Trump escribió en Twitter: “Norcorea se está comportando muy mal. Han estado ‘jugando’ con EU por años. ¡China ha hecho poco para ayudar!”