El SNAP dará seguimiento y apoyo a curas pederastas
La organización de víctimas de abuso por parte del clero señala que los agresores requieren ayuda psicológica para que al salir de la cárcel tengan trabajo y no sean un peligro
La Red de Sobrevivientes de Abuso Sexual por Sacerdotes (SNAP, por su sigla en inglés) de México pretende apoyar psicológicamente a curas pederastas y darles seguimiento para que al salir de la cárcel tengan trabajo y vigilar que no sean un peligro, explicó Joaquín Aguilar, director de esa organización.
Ante los ataques que ha recibido la Arquidiócesis de México por colaborar con SNAP para crear un manual y prevenir la pederastia, Aguilar aseguró: “Mi intención no es linchar a nadie, ni irme contra de nadie, ni sacerdotes ni obispos. Solo ayudar a las víctimas”.
Expuso que de 540 casos que SNAP tiene registrados en México, en dos se ha dictado sentencia a los curas y solo uno fue por pederastia (el del clérigo Carlos Valdés, por abusar de Jésús Romero Colín, a quien SNAP no representó).
De esos casos, explicó, la mayoría ya prescribió, porque las víctimas tardan mucho en hablar y el proceso no es fácil.
Aguilar recordó que el caso más antiguo es de 1940 y hace dos años falleció la víctima, quien tardó 62 años en denunciar el abuso que sufrió cuando tenía 11 años y era monaguillo.
Detalló que el SNAP se creó en México hace 10 años y enfrentó obstáculos, no solo por parte de la Iglesia, sino también del gobierno y la sociedad; sin embargo, en la actualidad la Arquidiócesis de México, con la llegada del cardenal Carlos Aguiar Retes, ha mostrado apertura para erradicar la pederastia y tener diálogo.
Contrario a lo que se ha señalado, aclaró Aguilar, el SNAP y la arquidiócesis “no hemos firmado nada”, ya que solo hubo un acuerdo verbal de colaboración para elaborar un manual de prevención, una comisión de víctimas y una campaña. “Mucho se ha dicho de que voy contra los curas o los obispos; no, si algún sacerdote comete un delito contra un menor, claro que ahí estaré, pero si ellos tienen una relación de mutuo consentimiento con alguien más que sea mayor de edad yo no tengo nada que decir... eso solo le corresponde a la autoridad eclesial y mientras no se cometa un delito a nosotros no nos interesa”, resaltó.
El SNAP cuenta con 49 psicólogos y abogados, todos voluntarios, para ayudar a las víctimas con acompañamiento y asesoría jurídica, en la que se les explica la situación legal, por ejemplo, por qué en ocasiones ya prescribió el delito.
Ayudar al delincuente
Aguilar comentó que en las reuniones con representantes de la arquidiócesis propusieron no solo atender a las víctimas, sino también a los curas que cometen ese delito. “Proponemos una reintegración en general. Por ejemplo, en caso de que se sentencie a un cura, después de cumplir su condena y ser retirado del sacerdocio, ¿qué va a suceder con él al salir? Pedimos que la Iglesia también pueda acompañar a esa readaptación”, explicó.
Para reintegrarlo, dijo, se busca elaborar un programa a través del cual se les dé un tratamiento mientras están presos y después buscarles trabajo, porque tras purgar su pena “como sociedad no tendríamos nada que exigirles”.
Que el SNAP conozca los expedientes de denuncias contra religiosos por abuso sexual en la Arquidiócesis de México es algo que también ha causado molestia entre algunos sacerdotes, a lo que Aguilar señaló que tendrá acceso a la denuncias de 2010 a la fecha, pero únicamente para conocer “la situación en que se encuentran los acusados, si la iglesia ya lo dio de baja en eso no intervendremos, no nos corresponde”.
El trabajo de la organización en México, aclaró, es independiente del de SNAP en Estados Unidos y algunos religiosos, concluyó, “no están de acuerdo en que se establezca un diálogo con la Arquidiócesis; sin embargo, respetaron la decisión y vigilarán el proceso”, concluyó. M