El cuestionado guardián de CU
Alfredo Saldívar ya se ha consagrado como bastión de Pumas
El 14 de agosto del 2010 será recordado siempre por Alfredo Saldívar. El portero ingresó de cambio por Alejandro Palacios, debutando en Primera División ante Monterrey con 20 años de edad. Canterano desde 2001, el cancerbero se formó por completo bajo el rigor del Pedregal, pasó por distintas escuadras con Jorge Campos como emblema y ejemplo. La labor no era sencilla: consagrarse y evolucionar, las prioridades.
Desde aquella oportunidad brindada por Guillermo Vázquez ante Rayados, Saldívar comenzó un camino complejo, en el que siempre estuvo la categoría y recorrido de Alejandro Palacios, antes de sus condiciones y reales posibilidades de consolidarse. Hubo oportunidades escuetas, pero fue justo al regreso de Memo a Pumas, a mediados de 2014, que se le abrieron más posibilidades.
Al principio, lesiones Palacios y después, bajas de nivel, supu- sieron mayor presencia para Saldívar. El arquero tomaba confianza y ritmo. Fue a inicios del 2017, que en medio de polémicas, la salida de y hasta críticas que suponían la llegada de gente de más experiencia, Alfredo tomó las riendas de la posición. Ante cualquier fallo, su propia afición le recordaba a su antecesor.
Apenas hace unos meses, antes de comenzar el Apertura 2018, la directiva trajo, por si acaso, a Miguel Fraga, un arquero que llegó al Pedregal como suplente, pero a la espera de algún fallo de Saldívar. "Yo estoy dispuesto a pelear deportivamente el puesto si es necesario; quiero trascender aquí", dijo El Pollo.
Hoy día, uno de los factores prioritarios de Pumas y su llegada a la Liguilla, incluso en la ida ante Tigres, es su portero. Hoy, parte de la esperanzas de Universidad para seguir avanzando en la fase final se posan sobre su guardameta. Tan cuestionado y minimizado.