“Con raíces fuertes y disciplina de bailarina”
Aunque nunca estuvo en sus planes dedicarse a la educación, la oportunidad de formar a niños y niñas de educación básica fue una de las más grandes satisfacciones que puedo tener la consejera presidenta del Instituto Estatal Electoral de Hidalgo (IEEH), Guillermina Vázquez Benítez, pues reconoció poder formar y apoyar a los menores en su educación fue un reto y una labor que con gusto volvería a desempeñar.
¿Cómo describiría la experiencia de dirigir una escuela en Ixmiquilpan?
La dirección de una escuela de educación básica en el municipio de Ixmiquilpan, de donde soy originaria, estuvo bajo mi cargo por algunos años; esto antes de que siquiera concursara para poder tener un cargo al interior del IEEH, cuando sale la convocatoria yo estaba trabajando de directora de lleno en una institución de educación básica: primaria, preescolar y secundaria; estaba al 100 por ciento con los niños, trabajando en una experiencia que nunca pensé tener la oportunidad de vivir, nunca pasó por mi mente ser educadora ni mucho menos; pero cuando se dio la oportunidad de estar ahí la tomé, yo tenía a cargo la dirección de primaria; y debo decir que la inocencia y nobleza de los niños, el haber tenido esa parte de su formación en mis manos fue una bendición muy grande.
¿Cuáles son sus grandes pasiones?
Mi amor por la danza clásica, en mi natal Ixmiquilpan tuve la oportunidad de tener una escuela de danza, ballet clásico para ser más específicos, en el cual pude llevar la disciplina y gracia a muchas personas en el Valle del Mezquital. Me gusta mucho la danza clásica y la folclórica, las danzas mexicanas que son muy ricas en tradición, muy coloridas; tuve la oportunidad de practicar estas danzas y sé del grado de dificultad que se requiere en la danza clásica: la disciplina, las horas de dedicación y de esfuerzo para llevarlo a cabo, es un arte que admiro mucho. En la danza comencé a practicar cuando tenía siete años, practicaba ballet clásico hasta los 14 o 15 años, eso te ayuda a formar valores, aunque siempre he pensado que esos son más personales, se aprenden desde casa; pero ser disciplinado constantemente te ayuda mucho, la danza hizo eso por mí, pero ya ente a una etapa de adolescencia, donde ni el tiempo, ni los objetivos empataban con seguir dedicándole horas al ballet.
¿Qué otro arte le gustaría aprender?
Me gustaría aprender a tocar un instrumento porque nunca es tarde, me encanta el saxofón, el piano y la batería, pero tendría que elegir cuál… a lo mejor me inclinaría por aprender a tocar un poco de piano, me gusta mucho.
¿Qué otros pasatiempos tiene?
A pesar de que la danza siempre fue la principal actividad que realicé en mi infancia y adolescencia, siempre tuve oportunidad de disfrutar del deporte, me gusta mucho el baloncesto y el tenis, pero al momento no practico ninguno, estoy en una etapa de oficina y de sillón permanente; pero espero poder retomar estas actividades porque se extraña el deporte, me dicen mucho que vaya en las mañanas, pero en las mañanas con las cosas del trabajo siento que no hay tiempo, espero poder tener tiempo para salir a correr o practicar bicicleta, porque siempre hay algo nuevo que se puede hacer.
Otro es ver películas, ya sea en una sala de cine o desde la comodidad de mi casa acompañada de la familia, sin embargo muchas veces el tiempo no es el mejor aliado para disfrutar de estas actividades, la dinámica de trabajo del IEEH es mucho esfuerzo, muchas horas; casi la mayor parte del día la paso en el trabajo, en la oficina; pero cuando no estoy aquí en el trabajo paso el tiempo con mis hijas, tengo tres hijas adolecentes, también visito a mi mamá porque no soy de la capital, por lo regular estoy allá, disfruto a mi familia, me gusta estar en mi casa y ver un poco de televisión.
Me gusta mucho el cine de suspenso, pero no me gusta de terror, porque son las peores que puede haber; también me gustan las infantiles desde que mis hijas estaban pequeñas me encantan; veo de acción también, de hecho no hay un género en particular que prefiera, únicamente las de terror no me gustan, además de que son malísimas, ya no asustan y la verdad no le encuentro mucho sentido; valoro mucho la vida y soy muy espiritual, creo que las películas de terror ofenden mucho a las personas que hemos perdido y que ya no están con nosotros.
¿Qué le hubiera gustado hacer si no estuviera a cargo del IEEH?
Me hubiera quedado al frente de la escuela en Ixmiquilpan; fue un trabajo que me trajo muchas satisfacciones, si bien no lo tenía planeado, estas oportunidades se presentan en la vida y debemos tomarlas.
“Estaba al 100 por ciento con los niños, trabajando en una experiencia que nunca imaginé”