Lucha política innecesaria
l mapa político hidalguense comienza a tomar forEma medio año después de la elección presidencial. Mientras unos ya decidieron su rumbo desde julio de 2018, otros se esperaron al inicio de este para poder definir sus proyectos. La búsqueda de adeptos y popularidad, va dejando ya en el camino huellas de lo que será el proceso electoral de 2020 cuando se tengan que renovar las 84 presidencias municipales hidalguenses.
Lo anterior comienza a provocar escenarios anticipados e innecesarios de lucha política. Ayer vimos un ejemplo con lo ocurrido en Mineral de la Reforma, donde el edil panista Raúl Camacho Baños, provocó abiertamente a funcionarios del gobierno estatal quienes organizaron una audiencia pública con la ciudadanía de la demarcación metropolitana.
Para empezar el edil no acudió y organizó su propia audiencia en otra locación. Después, giró instrucciones para que agentes de tránsito comenzaran el retiro de placas a vehículos de vecinos que acudieron a la audiencia, estacionados en la vía pública sin obstruir el tráfico.
La audiencia fue convocada por el titular de las Políticas Públicas, Israel Félix Soto, quien estuvo acompañado del secretario de Seguridad Pública, Mauricio Delmar, para tratar temas sensibles como la inseguridad de la zona limítrofe con Pachuca y Zempoala, una de las partes de más alta incidencia en Hidalgo.
El desdén de Camacho Baños, dicen, tiene su origen en el Congreso local, donde su esposa, la diputada panista Areli Maya Monzalvo, se ha volcado en apoyo a la mayoría legislativa de Morena, apoyando en todo momento las iniciativas y decisiones de los que hoy controlan a la Cámara y pactando recursos y gestiones exclusivamente para el ayuntamiento que gobierna su marido.
Como en La Reforma, comenzarán a salir los pleitos rumbo al 2020 en otras latitudes del estado, a mi parecer, de forma demasiado anticipada.
Raúl Camacho, edil de La Reforma, optó por no acudir a la audiencia pública programada