Un Puma a contracorriente siempre
Sé que al aficionado de los Pumas le da un poco lo mismo si el once titular se conformó el día de su última victoria al América, con ocho canteranos o con ocho extranjeros. Lo que quieren es ganar este tipo de partidos de una manera más frecuente.
Pero independientemente de esto, creo que el que los Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México hayan presentado el domingo en su estadio, ante su maravillosa afición, solo a tres extranjeros en su alineación inicial es algo que tiene que presumirse.
Portero, defensa de cuatro, y tres de los cuatro mediocampistas… Nada mal. Y el equipo fue todo el tiempo competitivo ante un rival armado hasta los dientes con los mejores jugadores del mercado continental.
Y les ganaron. Uno a cero, pero se quedaron con los tres puntos. Y ahí van los Pumas reaccionando de forma notable con su nuevo entrenador, el argentino Bruno Marioni de destacada militancia como jugador universitario hace algunos años. Un empate y dos triunfos consecutivos en la Liga.
Lo de los canteranos en un plan competitivo es algo que debe servir de aliento. Aunque exista plena conciencia de que quienes están destinados a marcar la diferencia son elementos como el paraguayo Carlos González (autor del gol del triunfo) o el chileno Felipe Mora… O Martín González o Víctor Malcorra o Juan Manuel Iturbe.
He insistido, como con ningún equipo, que los Pumas merecen ser juzgados de una forma un tanto distinta. Nunca que no se critique lo que se tenga que criticar. Si el presidente Rodrigo Ares de Parga se equivoca haciendo una declaración errónea e inoportuna se tiene que consignar con franqueza y honestidad.
Pero también deben destacarse las cosas buenas, que resultan después de dar buenas batallas a contracorriente casi siempre.
Reitero en que el momento que vive este equipo es mucho mejor de lo que muchos indicadores señalan.
Lo de los canteranos en un plan competitivo es algo que debe servir de aliento