AMLO e Hidalgo
El presidente y el gobernador volvieron a hacer de las suyas. Ahora fue en el municipio de Metepec en donde tras supervisar la operación de la clínica rural del IMSS, un sitio premiado por su calidad y atención, cumplieron la máxima política: atender, gustar y salir vitoreados.
El oficio con el que se desenvuelven ambos políticos es de destacarse por
el simple hecho de que pocas, o ninguna vez, en sus más de ocho estadías en el estado en giras conjuntas han tenido complicaciones o problemas de índole social. La realidad es que tanto AMLO como Omar Fayad siempre salen bien librados. Y no es que tengan o deban de recibir vituperios, sino que se conjugan diversas situaciones cada que viene el mandatario nacional. La logística, que aunque a veces falla no es tema sobresaliente,lacomunicación entre coordinaciones del gobierno federal y del estado, al final son todos viejos conocidos de la política local, así como el entendimiento que se ha alcanzado entre los dos gobernantes.
Al presidente se le ve feliz en Hidalgo y al gobernador se le ve igual de feliz recibiéndolo. Ambos insisten en que trabajan para el pueblo sin distingo de partidos o ideologías que enrarezcan el ambiente, hecho que se pondrá a prueba el siguiente año cuando ya sea época electoral.Al final los resultados son los que hablan y parece que la hecatombe mediática del ser AMLO el presidente y Fayad el gobernador no pasa de simples comentarios y especulaciones, pues la gente, los habitantes de pueblos y zonas apartadas a donde han acudido, los reciben de la misma forma, con aplausos, con peticiones y demandas.
Si no tiene un propósito el hecho de que exista un vínculo entre AMLO y Omar Fayad, el resultado parece ser positivo para los programas en Hidalgo. Podría pensarse que el presidente quiere ganar en Hidalgo y por otro lado el gobernador quiere tejer una estrategia social que le permita entregar los mejores resultados que un mandatario haya tenido y con eso, demostrar que el PRI puede seguir gobernando.
Al presidente se le ve feliz en Hidalgo y al gobernador se le ve igual de feliz recibiéndolo