Sargazo: tengo otros datos, Presidente…
Como suele suceder cada sexenio, quién sabe quién prepara la información sin rigor que a veces se le exhibe al Presidente de la República. Quién lo informa en esos casos. O mejor dicho, quién lo desinforma. Sucedió con Enrique Peña Nieto: los más altos funcionarios de su gabinete (la mayoría) no aceptaban datos periodísticos que les incomodaran y, sin inmutarse, trataban de refutarlos con números incorrectos o sesgados.
El jueves pasado, en su mañanera, Andrés Manuel López Obrador se puso a hablar del sargazo. Enseguida dio la palabra al secretario de Marina, José Rafael Ojeda Durán, y el almirante informó que en las playas de Isla Mujeres “no existe sargazo, está al cero”; que en Benito Juárez, donde está Cancún, “no hay sargazo”; que en Puerto Morelos, donde empieza la Riviera Maya, hay “cero por ciento de sargazo”; que en Solidaridad, donde está Playa del Carmen, “igualmente ahí no hay sargazo”; que en Tulum hay “un 60 por ciento de sargazo”. Y que en Cozumel, hay “más o menos un 40 por ciento de sargazo”.
En síntesis, el almirante informó que en Cancún y la mayor parte de la Riviera Maya (desde Puerto Morelos y hasta Playa del Carmen) ya no hay sargazo… en las playas. Ojo: dijo en las playas, pero omitió informar… acerca del mar invadido de sargazo.
Perdón, no sé quién le dio las coordenadas al almirante secretario, tal vez eran cifras de un buen día, pero yo tengo otros datos y, para decirlo suavemente, esa información que dio es imprecisa. Acabo de estar en la zona el fin de semana pasado (tengo amistades que viven ahí) y la realidad no es así como informó. El sargazo arriba todos los días, con mayor o menor intensidad, y las olas lo escupen en las playas, con mayor o menor fuerza, de acuerdo con las mareas. Todos los días, a diferentes horas, hay sargazo en las arenas.
Cada mañana, desde el amanecer, eso es cierto, hay marinos, trabajadores de los municipios, pescadores, taxistas, y obreros pagados por los hoteles, limpiando las playas con palas, tractores y con lo que se pueda. Limpian las playas con mayor o menor eficacia para que, horas después… arribe más sargazo. Es una ruleta de polución interminable.
En el mar, donde revientan las olas y unos metros mar adentro, todos los días hay sargazo en la zona. Yo intenté nadar sábado y domingo y no pude debido a la terrible peste de las algas estancadas en el mar, que además generan condiciones pantanosas para sumergirse en el agua.
La única manera de resolver este problema es que se dediquen los cuantiosos recursos necesarios para financiar el plan diseñado por especialistas (https:// www.milenio.com/opinion/juan-pablo-becerraacosta/doble-fondo/el-sargazo-y-el-mexico-fallido), que consiste en contener el sargazo antes de que se acerque a las playas. Me da mucho gusto y celebro que la Marina esté abocada a construir las embarcaciones necesarias para eso, como informó el almirante Ojeda Durán.
Mientras tanto, Presidencia debería abstenerse de dar a conocer datos sesgados o falsos, porque lo del sargazo es un problema gravísimo que, si no se resuelve, acabará por devastar la economía de la región y de cientos de miles de familias, además de que el Tren Maya no tendrá sentido que llegue a una costa que pudiera yacer desierta de turistas…
Presidencia debería abstenerse de dar información sesgada o falsa acerca del problema