La privacidad del estado serológico
Conocer nuestros derechos humanos y sexuales es necesario, sobre todo cuando se es una persona portadora de VIH/sida
Un lector me escribe para contarme que lo acaban de diagnosticar como portador del virus de la inmunodeficiencia humana, un retrovirus que ataca al sistema inmunitario de la persona infectada y puede derivar en el sida.
Le comentó a una persona de su trabajo y ésta le dijo, con tono de amenaza, que si no le decía al dueño de la empresa, ella lo haría. Obviamente él está asustado y por ahora tiene poca información.
El sexólogo David Barrios me explica que toda información sobre la seropositividad en nuestro país es privada y confidencial. La transgresión de esa norma es un delito. “No está obligado a explicar su estado serológico, y en caso de que sin su permiso alguien le cuente a otro individuo, es posible demandar a esa persona. En todo caso es conveniente buscar asesoría en la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y en el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred)”, me explica.
En su documento “El derecho a la no discriminación de las personas con VIH”, esta última instancia señala: “Cualquiera que sea el resultado es más probable que quienes se hacen la prueba tengan relaciones sexuales de menos riesgo o incurran en prácticas más seguras. Además, las personas que reciben resultados positivos pueden acceder al tratamiento disponible, tener una mejor calidad de vida, contar con servicios apropiados de orientación, manejar a discreción la confidencialidad y gozar de todos los derechos que les corresponden como miembros de su comunidad”.
La CNDH enuncia en su página de internet los derechos de las personas que viven con VIH o sida para identificar y denunciar las formas de discriminación arbitraria que
Toda información sobre la seropositividad en nuestro país es privada y confidencial
puedan cometer personas, funcionarios e instituciones públicas.
Explica que nadie está obligado a someterse a la prueba de detección del VIH ni a declarar que vive con el virus o con sida.
Si decides realizarte la prueba, tienes el derecho a recibir información suficiente, a que los resultados sean manejados de forma anónima y confidencial y a que éstos se te entreguen de forma individual y por personal capacitado. No deben informarse resultados positivos o negativos en listados de manejo público ni comunicar el resultado a otras personas sin la autorización expresa de quien se sometió a la prueba.
Vivir con VI H oc o ns ida no puede ser considerado como causal para la negación de servicios de salud, despido laboral, expulsión de una escuela, desalojo de una vivienda o expulsión del país. Tampoco se te puede limitar el libre tránsito dentro del territorio nacional, la salida del país o el ingreso al mismo.
Es decir, lo que la compañera de mi lector pretende hacer es un delito, y él puede demandarla, además de que la empresa no tiene por qué enterarse y, encaso de que él decida informar al respecto, su patrón debe seguir considerándolo su empleado, con los mismos derechosy obligaciones que señala su contrato.
Conocer la ley siempre nos va a ayudar a ubicar nuestros derechos y exigir su cumplimiento.