Las plantas que florecen para adornar los hogares en la pandemia
Pese a temer por su tienda de plantas ante la llegada del covid-19, Adriana Cordero Hernández ingresó a las redes sociales para lograr vender lo mismo que en su local; ahora obtiene más ganancias y planea diversificar el mercado
Para Adriana Cordero Hernández la contingencia sanitaria por el covid-19 fue en principio la incertidumbre de las ventas de su negocio que había inaugurado en enero del año pasado, pero tras desprenderse del miedo, echó un paso adelante y ofertó sus plantas en grupos de diferentes redes sociales y, aunque se preguntaba “¿quién va a querer plantas durante la contingencia?”, resultó que “florecieron clientes al por mayor” y su negocio también creció durante la etapa más dura para la economía de los hidalguenses.
Adriana es una mujer apasionada de las plantas, se graduó como ingeniera agrónoma, además de tener una maestría en Fisiología Vegetal y, hace un año y medio, inició con su propia tienda en Pachuca.
Un negocio físico en el que las plantas aromáticas, decorativas y suculentas forman parte de sus productos, pero durante esta contingencia, le dio el plus a la venta de éstas, porque ahora las entrega a domicilio y con detalles personalizados.
Todo parece indicar que el crecimiento del negocio es cada vez más, que pronto necesitará de alguien más que le ayude.
“Durante esta contingencia me decidí a promocionar mis plantas en las redes sociales; es un proyecto que inicié hace año y medio, tenemos una tienda física en el Centro de Pachuca pero cerré por la cuestión de la contingencia; me ha ayudado mucho para explorar otros canales, porque ahora me manejo en redes y los grupos de ayuda de mujeres ha sido una herramienta para que mi negocio esté creciendo.
Florecimiento inesperado
“El primer año creció, pero ha sido intenso este florecimiento en estos dos últimos meses, porque mi negocio se alimentaba mucho de las escuelas, por los negocios, por los estudiantes y era paso entre semana de todos ellos, por lo que cuando cerraron todo me quedé cuestionándome qué iba a hacer y lo primero que pensé es quién va a gastar su dinero en plantas en estos días si la gente va a gastar en productos de primera necesidad, y así las primeras semanas fueron un poco complicadas, pero en este momento me dije, te renuevas a muere el negocio, así que me moví”, explica.
Recuerda que al emerger al mundo del comercio en redes sociales supo que ella sería del grupo de las ventas, no de compras en internet, así que inició con la distribución y promoción de sus plantas de romero, suculentas, palmeras, menta, manzanilla, helechos y una gama de plantas que la gente compra para remodelar o darle vida a sus hogares durante la contingencia sanitaria.
“Estamos llevando las plantas a domicilio y estoy manejando un servicio de citas para aquellas personas que deseen conocer nuestra tienda en físico y las ventas han aumentado mucho, a través de esta estrategia que seguiré utilizando aunque concluya la contingencia”.
“Además que le he dado un valor agregado a la presentación ofreciendo a la mejor una macetita de plástico, también porque la gente está pasando mucho tiempo en sus casas y ve lo que hace falta en esos espacios especiales dentro de sus hogares, por lo que ahora agradezco a la gente que nos ha comprado, a la gente que nos recomienda y las recomendaciones que hacen en estos grupos de venta”, indicó entusiasta.
Venta de atención y servicio
Señaló que ella no solo vende plantas, vende atención y servicio, además de una asesoría técnica sobre la planta adquirida, después de la compra de ésta, “porque me gusta saber cómo va el crecimiento de la planta, el asesoramiento para que sea la indicada en el lugar que desean colocarla, si funciona con esa luz o darle una mejor sugerencia para evitar que ésta se seque, además de saber que tan cuidadosos pueden ser con ella, porque hay plantas más delicadas, así que les doy seguimiento y mantengo contacto”.
“Yo no sólo quiero vender por vender y que en quince días o un mes se deba comprar otra planta en un vivero porque la que vendí se murió, por lo que es un paquete de servicios lo que ofrezco”, expuso.
Es así como Adriana vende una gama de plantas que pueden ir desde los 25 pesos hasta arriba de los mil, pero con la garantía de que ese espacio especial en el hogar tendrá el sello de Ruta Natural, una tienda que ha sobrevivido en tiempos del covid-19 y seguirá creciendo, “porque jamás perderé el entusiasmo por este negocio y por las plantas que han sido parte de mi vida desde que era pequeña”, concluyó.
“Yo no sólo quiero vender por vender y que en quince días o un mes se deba comprar otra planta”