Afectaciones del sismo de 2017 son la clave
El tramo de la Línea 12 del Metro de Ciudad de México que colapsó el pasado lunes 3 de mayo, llevándose consigo la vida de 25 personas y dejando un saldo de 70 personas lesionadas, sufrió daños graves durante el sismo ocurrido el viernes 19 de septiembre de 2017.
No es necesario regresar el reloj más allá de esa fecha para encontrar el origen de la tragedia. El director del Metro
cuando sucedió aquel terremoto, Jorge Gaviño Ambriz, informó en su día sobre las afectaciones experimentadas por las columnas y las trabes de las estaciones próximas a la terminal de Tláhuac.
Dijo también que para reparar los daños debían realizarse una serie de obras, entre las que destacó la colocación de soportes para apuntalar las columnas lastimadas, así como “la fabricación de elementos de refuerzo adicionales para el tramo de las trabes”. Por otra parte, el entonces funcionario añadió que todas las columnas y trabes del viaducto elevado donde transitan los vagones del Metro serían revisadas mediante técnicas de ultrasonido y rayos X, con la finalidad de localizar vicios ocultos de fabricación, o bien, detectar daños imperceptibles originados por el terremoto.
La siguiente noticia que se tuvo fue la reactivación del servicio de la Línea 12, en todas sus estaciones, el jueves 31 de octubre de 2017 —es decir, 44 días después del terremoto. La reciente tragedia urge para que Gaviño y su sucesora, Florencia Serranía, exhiban documentos probatorios sobre la presunta colocación de los soportes destinados a robustecer las columnas dañadas, así como evidencia de que fueron también instalados los refuerzos previstos para mejorar el funcionamiento de las trabes.
Apura igualmente que las autoridades responsables muestren los estudios de ultrasonido y rayos X prometidos, así como el diagnóstico técnico posterior que habría permitido la reapertura del servicio.
Zoom: Si la administración de Miguel Ángel Mancera no hizo lo que prometió para resolver las afectaciones del 2017, ni la nueva administración de Claudia Sheinbaum corroboró que se hubiesen realizado las tareas previstas, estamos ante un problema político que, por su dimensión, no se resolverá ni se olvidará en unos cuantos días.
Urge que se muestren los estudios de ultrasonido y
rayos X prometidos