Otro plan ambiental

Recién se habló de los compromisos de Hidalgo para remediar la situación del medio ambiente, en particular en la región de Tula, y el gobierno federal echó a andar otro plan, que sería como el quinto o sexto, que se presenta en los últimos 20 años para remediar la contaminación. Desde inicios del actual siglo, cuando se comentó que la ONU teníacatalogadaaTulacomolaciudadmás contaminada del planeta, se prendieron las alarmas, siguen prendidas, pero nadiehaconsolidadounplannisehahecho nada. La industria contaminante en aire y suelo sigue a todo galope. No hay día desde hace dos décadas que no se queme combustóleo,quenoserecibanmillones de descargas de aguas residuales, que no haya producción de energía mediante uso de la refinería y la planta termoeléctrica, que nadie haya mejorado la producción de cemento que deja toneladas de residuos tóxicos, y otra vez, se llama a buscar una posible solución.

En 2009, el entonces gobernador de Hidalgo, Miguel Ángel Osorio Chong, presentó un gran plan para la región de Tula. No pasó nada. Años después Francisco Olvera hizo lo mismo, incluso con apoyo del entonces presidente Felipe Calderón quien estaba a pocos meses de dejar la presidencia y dijo que cambiaría Tula y todos los municipios. Tampoco pasó nada. Con Enrique Peña Nieto de plano ni se firmaron compromisos a sabiendas de que nadie haría nada, y efectivamente así ocurrió. Y ahora, con Andrés Manuel López Obrador y el gobernador Omar Fayad Meneses, suman al menos tres intentos de 2018 a la fecha, enquesequierecomenzar un plan de trabajo para mejorar el medio ambiente en Tula y municipios aledaños. No es por echarles la sal, pero esuncasoperdidoelque intenta de nuevo la Secretaría de Medio Ambiente federal, pues insisten en coordinar esfuerzos con activistas y sociedad civil, para atacar problemas que son de la industria nacional y extranjera, y que sin su colaboración, están de nuevo ante un proyecto donde no se hará nada.

Con Enrique Peña Nieto de plano ni se firmaron compromisos