Hidalgo y Querétaro
El Acueducto Tres ha generado noticias sobre la manera en que debería distribuirse equitativamente el agua para satisfacer las necesidades de los municipios.
No me refiero al último partido de futbol entre Tuzos y Gallos que terminó en empate, sino a las recientes noticias relacionadas con ambos estados que se han difundido en medios de comunicación, abordando asuntos desde violencia hasta la equidad en la distribución de agua, sin omitir las carreras electorales.
Las declaraciones erróneas del diputado local en Querétaro, Guillermo Vega Guerrero, quien dijo que Hidalgo y Estado de México eran estados sin ley, han generado una controversia innecesaria. Es crucial destacar que tales afirmaciones no coinciden con la realidad y que según encuestas, Hidalgo se posiciona como una de las entidades federativas con mejor percepción de seguridad por parte de la población de 18 años y más.
De hecho, al relacionar nuevamente el futbol y la seguridad, en 2022 fuimos testigos de uno de los episodios más caóticos en la historia del deporte mexicano por la violencia ocurrida en el partido entre Querétaro y Atlas. Lo que debía ser otro encuentro futbolístico, fue suspendido debido a terribles actos de brutalidad que dejaron al menos 22 lesionados, convirtiendo lo acontecido en La Corregidora en un “estadio sin ley”.
Otra noticia que vincula a ambos estados es la cuestión del reparto equitativo de agua entre Querétaro e Hidalgo, un tema crucial debido a la importancia estratégica de este recurso natural para ambas entidades. El Acueducto Tres ha generado noticias sobre la manera en que debería distribuirse equitativamente el agua para satisfacer las necesidades de los municipios involucrados, especialmente en Zimapán.
Se estima que la construcción de esta obra que podría extraer hasta 7 mil metros cúbicos por segundo de la presa Zimapán, requerirá una inversión cercana a los 14 mil millones de pesos. La controversia en torno a esta iniciativa no radica en su realización per se, sino en la desigualdad que provoca. Mientras atrae más recursos hacia Querétaro, existe un sector en territorio hidalguense, compuesto por al menos una decena de comunidades, que se queda sin la posibilidad de satisfacer siquiera necesidades básicas de servicio doméstico.
La disponibilidad y acceso al agua son factores determinantes para el desarrollo sostenible, la agricultura, la industria y la calidad de vida de las comunidades. Es esencial abordar el reparto de manera justa y eficiente para evitar conflictos y garantizar un uso adecuado de este recurso vital.
Que el ex titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo, Santiago Nieto, aspire al cargo de senador en su estado natal, Querétaro, representa un hito positivo para ambos estados. Nieto ha destacado a lo largo de su carrera en cargos federales por su capacidad y compromiso, y sus estrategias en Hidalgo fueron punta de lanza nacional en la búsqueda de personas y en la implementación de políticas innovadoras en materia de seguridad. Nieto demostró nuevamente una capacidad excepcional para abordar los desafíos más apremiantes en la procuración de justicia, destacando especialmente la “estafa siniestra”, el maxiproceso de investigación que involucra en desvíos millonarios de recursos públicos a ex alcaldes, ex directores, ex subsecretarios y ex secretarios de Hidalgo.
Sin embargo, es relevante señalar que Francisco Fernández Hasbun, el sucesor de Santiago Nieto designado precisamente por el gobernador Julio Menchaca Salazar, no solo hereda los procesos e investigaciones vinculadas con la “estafa siniestra”, sino que también ha expresado de manera contundente su postura. Su afirmación de que aquellos que se entrometan con Hidalgo “la van a pagar” no solo refleja determinación para quienes creen que las investigaciones de la “estafa siniestra” tendrán un impacto menor, sino también para aquellos servidores públicos que buscan desviar la atención negativa de sus estados, ya sea por sus estrategias de seguridad, proyectos de inversión o su “estadio sin ley”. Ahora solo nos falta que el diputado Guillermo Vega Guerrero quiera construir un muro en los límites de Querétaro.
La disponibilidad y acceso al agua son factores determinantes para el desarrollo sostenible, la agricultura y la industria