Nace y crece… en seco
M uchas veces lo más cercano no necesariamente es lo más visible. Una industria que está muy presente pero que pocas veces se manifiesta y que más bien se conduce de forma discreta es la especializada: construcción ligera o en seco.
Su mercado se caracteriza por productos que resuelven de manera práctica, rápida y económica las construcciones, que como ya les comentaba en una anterior entrega, las vemos aparecer como flores, un día sí y otro también; se trata del uso de paneles de yeso o tablaroca. Tienen, como todo, sus pros y contras.
Estos sistemas, presentes en construcciones de todo tipo, como edificios, vivienda, cines, aeropuertos, centros comerciales y en las torres más altas del mundo, cuentan con tecnología de punta que provee soluciones anti fuego, contra moho, que aíslan el ruido, que mejoran la acústica, entre otros beneficios.
En México, el valor total del mercado de la industria de la construcción en seco, considerando sus diferentes categorías, es de entre 500 y 600 millones de dólares, según comentó recientemente Fernando Fernández, directivo de USG, la empresa creadora de la Tablaroca®, producto que celebra sus primeros 100 años en el mundo. Sí, se festejó con pastel y en todo lo alto este invento.
La empresa estadunidense tiene fuerte presencia en México, con cinco plantas en regiones estratégicas del territorio nacional. Desde donde también exporta hacia Latinoamérica.
Se estima que durante 2016 esta industria creció 6%; cifra que no se veía desde 2008, cuando se produjo la crisis inmobiliaria mundial. USG creció a su vez 11%.
En México, el mercado de tablaroca va de 45 a 50 millones de metros cuadrados y 80% de las construcciones del rubro residencial plus vertical (edificios) ya cuenta con sistemas en seco.
Aunque la tablaroca tampoco es que la haya tenido fácil, pues lo ligero a simple vista es sinónimo de débil o endeble. Sin embargo, precisamente porque tiene su soporte en la tecnología, va más allá de los ladrillos, es un sistema probado de carga y resistencia.
USG es una firma global con más de 100 años, cuyo eje de su liderazgo es la innovación, es por ello que tiene más de 4 mil patentes y un Centro de Innovación y Desarrollo único en su tipo, en el que hacen todas las pruebas a sus materiales.
Un aspecto relevante para la firma es su compromiso con la sustentabilidad, a través de la creación de productos ambientalmente amigables. Esta empresa tiene una fuerte vinculación con el USGBC, encargado de la certificación LEED para construcciones sustentables.
Recientemente, la firma celebró el Día del Tablaroquero, una fiesta para más de 12 mil colocadores de este material en el país, en la que reconoció su gran labor y fidelidad a la marca. Esta celebración tuvo nada más que a los Los Ángeles Azules, quienes pusieron a bailar a los tablaroqueros y sus familias.
USG ha invertido en México 350 millones de dólares y todo pinta para que siga así de fuerte. Por lo pronto, acaba de apostar 20 millones de dólares a su planta en Monterrey para ampliar una nueva línea de producción.
Que siga la celebración hasta el 3 de mayo, Día de la Santa Cruz y los constructores. Y si no ¿de qué está hecha una nación?