ELLOS MUEVEN AL ZOOLÓGICO GUADALAJARA
Veterinarios, jefes, empleados y vendedores hacen que el parque tapatío funcione todo el año
Si bien a sus tres décadas de existencia el Zoológico Guadalajara se ha convertido en un referente en la ciudad y un espacio de suma importancia para la flora y fauna de miles de ejemplares, es gracias al trabajo de cientos de personas que el emblemático lugar puede lograr una coordinación total.
Un total de 350 personas, entre administradores, veterinarios, biólogos, jardineros, ingenieros, personal de aseo, encargados de tiendas, de aéreas de comida, cuidadores, prestadores de servicio y empleados en general, apasionados y orgullosos de lo que hacen, mantienen el ritmo en las instalaciones y permite que se cree una armonía que facilita la convivencia.
“Una cosa digna de resaltar es que no tenemos rotación, la gente está conforme con su trabajo y gusta mucho de la labor que se empeña y permanece aquí, tan es así que 22 personas alcanzamos los 30 años laborando aquí”, dijo en entrevista el director del Zoológico, Francisco Rodríguez Herrejón.
La solidez y constante capacitación del equipo ha permitido que los nuevos proyectos se concreten en tiempo y forma así como que el ser parte del Zoológico sea un muy codiciado trabajo. “Hemos creado una base muy sólida de empleados que se ha capacitado muy bien, las vacantes de trabajo son escasas, las pocas plazas que se generan anualmente se dan porque alguien renuncia, en el peor de los casos, o por conformación de proyectos nuevos. La mayoría de los que solicitan son personas que tienen el gusto por los animales y la vegetación y que verdaderamente disfruta lo que hace, eso es lo que nos ha permitido que el zoológico se haya consolidado y que sea la institución que hoy en día es”, detalló.
Es precisamente Francisco Rodríguez Herrejón uno de los trabajadores del Zoológico que cumplirá 31 años de labor en este espacio, él, médico veterinario, originario de Morelia y con ocho años de experiencia en el Zoológico de aquella ciudad, dejó todo y se instaló en Guadalajara, para estar de cerca en el proyecto el cual vio nacer siendo director técnico.
“Afortunadamente tenía experiencia, en la Universidad Michoacana hice mi carrera, tuve también la oportunidad de trabajar por ocho años en el zoológico de allá que en aquel entonces era el más importante de la República, posteriormente hice estudios en el extranjero que me permitieron ganar experiencia que utilizamos todos los que trabajamos aquí desde el principio”, explicó.
Fue Rodríguez Herrejón quien se encargó de “conseguir” algunos ejemplares para el Zoológico, así como de participar en los planes a futuro del espacio, gracias a sus conocimientos, disposición y pasión por lo que hace, pronto se convirtió en el director general de la institución y vio cómo se consolidó bajo su dirección.
“En lo personal creo que sí tuve el apoyo de muchas personas y más que aptitud yo tenía una muy buena actitud. La renovación es constante, no hay monotonía en este trabajo, todos los días tenemos algo nuevo, y existen afortunadamente y gracias al apoyo del consejo de administración, recursos para llevar a cabo muchos otros proyectos que poco a poco iremos dando a conocer a la ciudadanía”, concluyó.
Gregoria García González, conocida como Goyita, es la encargada de la fuente de sodas y es otra de las fieles trabajadoras del plantel, pues a la par del Zoológico cumplirá 30 años de labor, agradecida y orgullosa de haberse integrado al equipo desde que arrancó. “30 años aquí he pasado cosas buenas y malas, la mayoría
No hay monotonía en este trabajo, todos los días tenemos algo nuevo” Francisco Rodríguez Herrejón DIRECTOR DEL ZOOLÓGICO DE GDL Representa mucho este trabajo, porque he cumplido todo lo que me he propuesto” Gregoria García González ENCARGADA DE LA FUENTE DE SODAS Hemos crecido en nuestra profesionalización y tenemos logros muy importantes” Gonzalo Elizondo VETERINARIO
buenas, yo tengo dos hijos y esto me dio para pagar sus carreras, compré mi casa, realmente he salido adelante”, dijo.
Goyita señaló que se enteró de la vacante debido a que vive a sólo 10 minutos del lugar, sin embargo gracias a un anuncio que escuchó en la radio decidió ir a informarse. “Estudiaba y trabajaba, pero como rolábamos turnos no me gustó, preferí el zoológico porque me queda más cerca y pensé que estaría mejor y eso es lo que pasó, supe por el radio, pero más que nada porque yo vivo por la zona y empecé a ver las construcciones, supe que harían un zoológico, me llamó la atención y vine a buscar empleo”, contó.
Atender al público, cobrar y el manejo de comida son parte de su labor. Comenzó vendiendo paletas, luego raspados, pronto fue encargada de un snack y ahora se despide del zoológico, pues está por pensionarse siendo la encargada en el restaurante, sin embargo seguirá ligada al lugar, pues uno de sus hijos trabaja en el área del safari, “he visto demasiados cambios, representa mucho este trabajo, porque he cumplido todo lo que me he propuesto y he estado muy a gusto y me voy muy contenta”, finalizó.
El veterinario Gonzalo Elizondo tiene una historia similar, cumple 32 años en el zoológico. Llegó para hacer su servicio cuando este apenas era un plan, aunque con mucho trabajo, pues tras él quedó al cuidado de los animales reubicados del Parque Agua Azul.
“Ha sido muy padre, me tocó estar antes de que se iniciara, vine en el 86, habían quitado el Parque Agua Azul y todos los animales los habían traído para acá con el plan del Zoológico, terminé mi servicio y con la fortuna de quedarme a trabajar, entonces vamos a cumplir 32 años”, detalló.
Gonzalo no concibe la idea de no ser parte del Zoológico, pues se ha convertido en su segunda casa y el equipo en su familia, además que convivir con tantas especies es algo que le parece un sueño y es lo que más disfruta y agradece.
“Me he desempañado como encargado de diversas áreas. Uno llega acostumbrarse, pero se da cuenta de que es difícil de que todo el mundo tenga la oportunidad de trabajar con tan diversas especies, tan especiales y raras y realmente no lo imaginaba”, dijo.
Señala que dentro del Zoológico ha presenciado importantes nacimientos, así como innovaciones y modernizaciones del espacio, ahora es el encargado de las aves, y trabajan en la reproducción y liberación de guacamayas, tareas que representan grandes retos, pero a la vez grandes satisfacciones.
“Ha crecido, se ha desarrollado tanto en infraestructura, en atracciones para los visitantes, también nosotros hemos crecido en nuestra profesionalización y tenemos logros muy importantes en lo personal, siempre ha sido vanguardista”, finalizó.