Pide el ombudsman estatal justicia y atención a víctimas
El presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Jalisco (CEDHJ), Alfonso Hernández Barrón, conmemoró el aniversario de las explosiones del 22 de abril de 1992 en el Sector Reforma, allí destacó el impacto que este hecho tuvo en la sociedad tapatía y la falta de justicia y medidas de restitución para los afectados de este hecho, que continúa impune a 26 años de haber sacudido a Jalisco.
“El 22 de abril de 1992 ocurrió la peor tragedia que ha vivido nuestra ciudad en su historia, hay un antes y después en la identidad de nuestra comunidad. Desde entonces hay una herida abierta que hoy podemos afirmar con toda certeza, que no ha sido atendida debidamente por las autoridades. El Estado mexicano tiene una deuda con las víctimas de esta tragedia, y cuando hablamos del Estado mexicano nos referimos a los tres niveles de gobierno”, dijo Barrón. Destacó que aunque han pasado los años y hay en México nuevas leyes, éstas no se han incluido en el análisis y en la atención de este problema: “hoy por hoy tenemos una ley general de víctimas y otras leyes, tanto nacionales como locales, que establecen la obligación de la reparación integral del daño”.
Detalló que esta reparación integral incluye las medidas de restitución, cuando esto no es posible como en mucho de los casos que ocurrieron el 22 de abril, vienen las medidas de compensación, las medidas de satisfacción, de rehabilitación, y las garantías de no repetición. “Todo esto no se ha cumplido, y tiene que analizarse y considerarse, porque la afectación a las víctimas persiste, y esto es tan evidente cuando escuchamos los reclamos por la falta de atención médica y los medicamentos (…) aquí están los hechos de cómo ha habido una vulneración permanente que hace vigente la exigencia de justicia”, añadió.
Lanzó un llamado a los tres órganos de gobierno pidiendo justicia, atención integral a las víctimas de las explosiones, y a la comunidad en general, que aún tiene la incertidumbre de quién las ocasionó. A los ciudadanos que no fueron afectados directamente, pidió no ser indiferentes, y recordar y registrar el hecho que marcó la historia en Guadalajara.