Parquímetros, los únicos que están en la mira
de una tienda de conveniencia.
Algunas de las compañías de comunicación que prestan el servicio de teléfono público han hecho un esfuerzo por mantenerse vigentes y ofrecen, además de servicio de comunicación telefónica, servicio de conectividad mediante datos en esquema de prepago, a pesar de ello, es evidente que el hecho de que un gran porcentaje de los ciudadanos puedan tener acceso a un teléfono celular ha mermado de manera considerable la utilidad de estas casetas telefónicas, que encabezan la lista de mobiliario en la ciudad que parece destinado a convertirse en una chatarra urbana.
Entre el catálogo de cacharros que se encuentran en la vía pública y que al menos el Ayuntamiento de Guadalajara tiene en la mira retirar, se encuentran los parquímetros de moneda, los cuales son parte de un proceso de modernización de estacionómetros en la ciudad, algo que obedece también al uso de tecnologías para el cobro virtual de espacios de estacionamiento en la vía pública.
Este proceso de renovación tras retirar la concesión a la empresa Metrometers, que desde 2012 se había hecho cargo de administrar los estacionómetros en la ciudad, contempla también el limpiar las calles de parquímetros, pues actualmente el pago de estos espacios se puede realizar de manera virtual a través de tres opciones que brinda esta nueva modalidad aplicada en siete de doce zonas que comprenden el municipio de Guadalajara.
El retiro de parquímetros inició en 2017 y actualmente, el gobierno tapatío ha quitado de la vía pública un total de mil 34 máquinas que se encontraban en zonas como Lafayette, Centro, Americana y Libertad.
No obstante, aún resta un número un poco mayor de unidades tragamonedas que se encuentran en las calles de Guadalajara, mil 600 de ellas y que también se contempla que puedan ser removidas en los siguientes meses.
El retiro de los aparatos comenzó el año pasado; el gobierno municipal ha quitado mil 34 máquinas
El retiro de estos parquímetros corre a cargo de la Dirección de Obras Públicas y para costear el mismo se utilizan fondos obtenidos por el propio cobro de aparcaderos en la vía pública, pues no solamente se trata de retirar, sino que se debe realizar una labor de restauración del espacio del cual haya sido extraído de este aparato que, hasta hace algunos años, era el mecanismo para que los automovilistas pagaran la tarifa por el uso de la vía pública para estacionar sus automotores.