Valeria
Tu arribo a este planeta fue la anhelada culminación de una gestación de nueve meses. Llegaste a este mundo hace nueve días (15 de septiembre). Tu nacimiento es la primera de muchas aventuras que te depara el destino. Habrá unas buenas, otras no tanto; así es la vida.
Verte tan pequeñita y frágil me conmueve profundamente. En breve estarás caminando y empezarás a balbucear tus primeras palabras. Cuando menos lo imaginemos estarás lista para debutar en el kínder, A partir de ese momento iniciarás tu trayecto en pos de una profesión. Ese trayecto significará 20 años de preparación y capacitación durante tu infancia y juventud. Esos pueden ser los primeros 20 años mejores de tu existencia. Vendrán más.
Durante tu estancia en este mundo habrás de fincar sólidos cimientos para enfrentarte a los vertiginosos cambios del mañana. En el año 2043, cuando hayas cumplido 25 primaveras, este mundo será totalmente distinto al actual. La ciencia y la tecnología habrán avanzado exponencialmente. Los valores que te inculquen tus padres serán tu guía y consolidarán tu personalidad y tu carácter. Con estas bases estarás preparada para tomar decisiones adecuadas. Sabrás opinar o callar, según las circunstancias. Habrás aprendido a asumir con humildad el éxito de tus logros y aceptar serena e inteligentemente tus fracasos. Habrás aprendido a ser consciente y objetiva en cuanto a tus pensamientos.
Deseo fervientemente Valeria, que en los próximos años desarrolles tu intuición y hagas de la comprensión y la tolerancia los ejes rectores de tu actuar, cualidades determinantes para la sana interrelación con nuestros semejantes. Cuando estas características sean parte de tu esencia, estarás preparada para enfrentarte a los avatares de un mundo que te depara muchas sorpresas.
Yo, tu abuelo, te amé desde el instante mismo que supe que venías en camino. Refrendé ese profundo sentimiento por ti, cuando tenías escasas horas de nacida y contemplé cautivado tu carita sonriente, supe entonces, Valeria, que a partir de ese momento serías una resplandeciente luz en mi existencia. Valeria es la cuarta de mis nietas. En orden de aparición: Alba, 22 años. Alexa, 20 Años. Vero, 18 años. Valeria, nueve días. Cada una de ellas tiene un espacio en mi corazón. Me considero afortunado. Las adoro a las cuatro.