El sexenio de la niñez desaparecida
Del cúmulo de historias que suman la escalada de violencia durante este sexenio, la desaparición de niñas y niños es sin duda una de las que más deben estremecernos, porque aún en ese caos de muerte e impunidad la niñez tendría que estar blindada y arropada por el Estado. Esto evidentemente no sucede, las cifras lo confirman.
Este sexenio podrá ser recordado por numerosas deudas en materia de derechos humanos, pero llevará un sello que ojalá no sea jamás superado por futuros gobiernos. De acuerdo con el informe elaborado por la Red para los Derechos de la Infancia en México (Redim) “Desapariciones de niñas, niños y adolescentes en México”,
75 por ciento de niñas, niños y adolescentes desaparecidos entre
2007 y 2018 ocurrió durante el sexenio de Peña Nieto.
Según la Redim, cerraremos esta etapa en México con casi 5 mil niños desaparecidos durante el periodo. Con corte al mes de abril de este año, 37 mil
437 personas en el país se encuentran en calidad de desaparecidas, de acuerdo con el Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas, Rnped-Segob. De este enorme número de desaparecidos 17.7 por ciento son niñas, niños y adolescentes.
Para ponerle rostro a este problema estructural, es importante saber que, de cada 10 niñas y adolescentes desaparecidas, ocho están entre los 13 y los 17 años. Si con esto no fuera suficiente, debemos saber que además de que desaparecen cuatro niñas y/o niños al día, tres son asesinados.
También el informe da luz sobre los estados de la República que mayor número de desapariciones de niñas, niños y adolescentes tuvieron durante este periodo. Entre Puebla —bajo el mandato de Rafael Moreno Valle— y el Estado de México —teniendo como gobernador a Eruviel Ávila— acumulan 40.5 por ciento de las desapariciones del país. El hecho de que sea en los municipios de Ecatepec, Toluca, Nezahualcóyotl y Puebla donde más desapariciones de niñez se presentan, revela también las condiciones socioeconómicas de la mayoría de las víctimas. Claramente la atención que deben dar los gobiernos locales al tema es imperante. No es casualidad que en estos estados las redes de trata han ido ganando terreno, mientras la impunidad les cubre.
No sé usted, pero cuando yo recuerde el sexenio que concluye será inevitable que este dato devastador venga mi mente: 5 mil niñas, niños y adolescentes desaparecidos.
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