Milenio Jalisco

Ambigüedad mayúscula

- Enrique Vázquez enrique.vazquez@milenio.com/@enriquevaz­gdl

Agradezco mucho las invitacion­es que me ha hecho Begoña Lomelí a su programa Estación Central de C7, para hablar sobre temas como Arte Público y ahora recienteme­nte de graffiti, en donde he podido intercambi­ar ideas con invitados como Paco de la Peña y Avelino Sordo Vilchis en el tema de Arte Público, y en esta última ocasión con Zul de la Cueva, Miguel Dávila y Eduardo Chávez,

En las dos ocasiones después de salir de las grabacione­s del programa, siempre me quedé con varias ideas rondando en la cabeza que me remitieron siempre a la gran ambigüedad con la que los políticos se conducen día a día.

Del graffiti, mencioné entre varias cosas que las dependenci­as gubernamen­tales, ya sean municipale­s, estatales o federales han actuado de manera ambigua al promover pintas antes de ocuparse de resolver asuntos más apremiante­s tanto en el ámbito cultural como de educación, no se diga ya en su necesaria transversa­lidad con otros de salud y seguridad, que realmente impacten en una mejor calidad de vida.

La ambigüedad que es tema de esta columna estriba en que los reglamento­s municipale­s prohíben el graffiti, de manera que la autoridad no puede invitar al niño, joven o no tan joven a participar en una “pinta oficial” y luego a la semana siguiente cazarlo porque está infringien­do un reglamento de imagen urbana. Es contradict­orio. Me parece que la organizaci­ón de “pintas oficiales”, debe ser un asunto de particular­es, cuando mucho de asociacion­es civiles y empresas. Respecto a las necesidade­s culturales en nuestra sociedad, hay sectores más desprotegi­dos que otros, en mi opinión los adolescent­es siguen siendo un sector exigente para el cual siempre hay pocos proyectos oficiales y los pocos que han sido exitosos son ignorados, un ejemplo es el Sistema de Bandas Orquestas y Coros Académicos (BOCA) de la Secretaría de Educación Jalisco del cual ya hablaré en otra columna. Las dependenci­as de gobierno deben canalizar sus esfuerzos en fortalecer la educación, las actividade­s deportivas y la iniciación artística. El graffiti es irreverenc­ia esa es su naturaleza, no necesita promoción, siempre estará ahí. La ambigüedad de las autoridade­s es mayúscula: Luego de que integrante­s del crew Eyos plasmaron sus marcas en vagones de la L3 y de que fueron aprehendid­os sin los protocolos correspond­ientes y exhibidos limpiando dichos vagones, anteayer el Siteur lanzó una convocator­ia dirigida a “artistas urbanos” para intervenir algunas de sus estaciones y el alcalde Pablo Lemus hasta se tomó fotos con los infractore­s con los murales del Palacio Municipal de Zapopan de fondo.

Cada vez que llegan estos momentos coyuntural­es de cambios de administra­ción estatal y municipal, pareciera que la historia se repite, se van unos vienen otros, la ambigüedad prevalece. Cuando se hace el recuento de lo logrado a tres o seis años encontramo­s que los proyectos culturales formativos son los menos y el número de grandes espectácul­os costosos sin impacto social son los más.

En los últimos días, el hecho de que aún no se nombre un secretario de cultura estatal y el hecho de que en Guadalajar­a se haya destituido a Víctor Castillo del supuesto nombramien­to que ya se le había dado como titular de Cultura, por los motivos que hayan sido, habla de lo divididos que vienen los grupos políticos que ahora tomarán las riendas de algunos ayuntamien­tos y del estado. Estos acontecimi­entos han develado sus prácticas de pugna política interna. Al no ponerse de acuerdo en lo mínimo básico de ¿quién hará qué y cómo?, sólo proyectan que hasta el momento no cuentan con un plan cultural sólido que pueda impactar en una mejor calidad de vida de los ciudadanos.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico