Calderón contra AMLO
Hasta que por fin alguien se atrevió a hacer algo para contrarrestar el impacto de Andrés Manuel López Obrador en la opinión pública nacional. Por supuesto, me refiero a la renuncia de Felipe Calderón al PAN, que aparentemente culminará en la creación de un nuevo partido político.
Y no, no lo digo porque odie al Presidente electo. Lo digo por la más elemental salud mental. En ninguna democracia de verdad cabe la posibilidad de que todo lo que haga un político como AMLO sea perfecto, maravilloso y divino, y que todo lo que hagan los demás sea malo, sucio y catastrófico.
El Peje necesita contrapuntos para validar sus decisiones, necesita enemigos, opositores, y el PRI y el PAN están como en otra realidad, como si lo que menos les importara fuera molestar a López Obrador.
Me queda claro que Calderón, Margarita Zavala y sus seguidores van a batallar para sobrevivir con la enemistad del PAN y con el odio de los AMLOvers, pero alguien tenía que dar un primer paso en el restablecimiento de un equilibrio crítico.
Ya salieron los ataques del círculo rojo: que si Calderón fue muy mal presidente, que si es autoritario, que si la guerra contra el narco, que si no cumple lo que promete.
Yasalieronlosmemesdelos fanáticosdelPresidenteelecto: que si López Obrador sí había ganado las elecciones en 2006, que si Calderón es un borracho, que si Margarita mintió para obtener el registro como candidata independiente. Me parece perfecto y supongo que ellos están preparados para esa clase de comentarios, ¿pero por qué nadie más está haciendo algo duro para contrapuntear a don Andrés Manuel? ¿Por qué nadie está creando un escenario que compita contra Morena rumbo a las elecciones presidenciales de 2024?
No sé si Calderón vaya a poder crear su partido y convertirlo en un éxito en poco tiempo, tampoco si vaya a lanzar a Margarita Zavala en 2024.
Lo que sí sé es que, fuera de esto, no existen personajes presidenciables y que nadie los está creando. Es como si con López Obrador hubiera terminado una época y a partir de él no fuera a haber futuro.
¿Ya se puso a pensar en lo que va a pasar dentro de seis años si las cosas siguen como van, más allá de que se haga lo del partido de Calderón? Obvio, no habrá reelecciónperosídedazo.Elpróximopresidenteserá el que ponga Andrés Manuel López Obrador.
A lo mejor el señor resulta un genio y su sucesor, el mejor. ¿Pero esto es lo que queremos? ¿En eso va a acabar nuestra democracia? Los pecados de Calderón son muchos para una sociedad como la mexicana: ex presidente, riqueza, violencia extrema.
Además le da continuidad a la rivalidad que ha tenido con el Presidente electo desde 2006. Pero no deja de ser una historia interesante en el contexto actual. ¿Quién se va a animar a apoyarlo? ¿Quién se va a atrever a hacer algo medianamente parecido?
¿De dónde va a salir el gran candidato presidencial que le haga ruido a Morena en la elecciones de
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2024? ¿Volveremos a los tiempos de los candidatos únicos? ¿Ahora entiende la importancia y la valentía que hay detrás de lo que Calderón está haciendo?
No es un tema de preferencias personales. Es un tema de la más pura y genuina democracia. ¿O usted qué opina?
necesita contrapuntos para validar sus decisiones, necesita enemigos